Este sábado en Tijuana (México), Zanfer Promotions organizará una velada que supondrá la vuelta de dos nombres importantes en el boxeo internacional tras sonadas derrotas.
Por un lado, Luis Nery (35-2, 27 KO) se medirá al nipón Kyonosuke Kameda (15-3-2, 9 KO), a diez asaltos en el peso pluma. El Pantera volverá tras haber sido noqueado en mayo del año pasado por Naoya Inoue, a quien llegó a mandar a la lona. Será un test para ver en qué estado se encuentra el excampeón mundial gallo y supergallo, de 30 años.
Además, en un vergonzoso duelo (por decir algo), el peso pesado cubano Frank Sánchez (24-1, 17 KO) buscará retornar al triunfo tras haber sucumbido contra Agit Kabayel, también en mayo de 2024. La contienda presenta un obvio diferencial entre el nivel del caribeño y su rival que roza lo denunciable, pues Sánchez pugnará a seis rounds contra el modestísimo Ramón Olivas (18-24, 12 KO), que ha sido anestesiado en sus cuatro últimas apariciones. Si bien es cierto que tras una derrota se busca el rodaje del boxeador, es difícil de justificar que a un boxeador como el cubano le arrojen, casi a los leones, a un pobre jornalero en caída libre.
La velada no podrá ser seguida en España, pero sí en Hispanoamérica, mediante la plataforma ESPN Knockout.
