Darío Pérez
@Ringsider2020

Hace unos días, os presentábamos en ESPABOX a Andrés Campos (9-0, 2 KO), un púgil del peso mosca en el que el boxeo chileno tiene muchas esperanzas depositadas. Clasificado en listas mundiales WBA y WBO, vuelve este sábado tras un año de parón con la ilusión de seguir subiendo en el ranking y aspirar a metas mayores en unos meses. Recibe amablemente a ESPABOX en los últimos días previos a la pelea que encara.

-¿Qué tal estás, cómo va todo por Chile? ¿Acabando de superar la pandemia?
-Muy contento por la entrevista. Todo bien, acabando la preparación para mi pelea próxima. La situación está regular aquí, hay un rebrote, pero me estoy cuidando mucho y mi familia también, esto no se va a cancelar de un día para otro.

-Para situarnos, ¿Qué tal es la situación actual del boxeo en tu país? Nos referimos a nivel de apoyos, posibilidad de verlo en televisión, seguimiento en prensa, etc.
-En casi todo el mundo, y acá en Chile igual, el deporte más popular es el fútbol. Todavía nos falta bastante para llegar a lo que fue el boxeo antiguamente aquí, donde las grandes peleas se transmitían por televisión en abierto, pero estamos resurgiendo. Hay una camada de boxeadores chilenos con buenos resultados, en los que me incluyo, y eso es positivo porque pronto daremos mucho que hablar.

«Mi ídolo es Manny Pacquiao»

-Nos gusta siempre conocer la historia detrás de cada boxeador, así que cuéntanos de qué manera te aficionaste al boxeo y empezaste en este deporte.
-Empecé por un amigo. Todo nace de que yo era un chico problemático en la escuela, siempre me estaba peleando en el colegio y en la calle, y todo me vino muy rápido en el boxeo: salí campeón nacional pronto, con solo seis meses de entrenamiento, y luego ya me llamaron para el equipo chileno, me concentraron, estuve en clasificatorios panamericanos olímpicos y buenos torneos a nivel internacional.

-Entonces no te fue nada mal como amateur, y lo estás reeditando en la etapa profesional.
-Por suerte he podido tener incluso más éxito ahora por la buena experiencia que traía del boxeo aficionado. He ganado tres títulos en siete meses, algo inédito en el boxeo chileno, y muy buenas preparaciones para mis peleas, un trabajo sin el cual no me podría ir bien.

-Profesional desde 2018, estuviste muy activo hasta que llegó el covid, con nueve peleas en año y medio. Da la impresión de que, si a todos los púgiles del mundo les frenó la pandemia, a algunos os hizo más daño. Porque incluso boxeaste el 14 de marzo, justo ahí nos confinaron en España. ¿Cómo te has adaptado y mantenido en forma este año sin pelear?
-Efectivamente, tuve la suerte de pelear un viernes y para el lunes ya se habían cancelado todos los eventos deportivos. Y, a pesar de ser muy difícil por la pandemia, para mí fue un buen año. Tuve la oportunidad de firmar con la promotora australiana Dragon Fire, de Tony Tolj, y eso me permitió estar dos veces en el gimnasio de Top Rank en Las Vegas entrenando con Andrew y Jason Moloney, que se preparaban allí para sus respectivas peleas por títulos mundiales. Inactivo no he estado, siempre me he seguido preparando con gente de altísimo nivel y nunca he parado de entrenar y estar activo.

-Y vuelves este sábado. Cuéntanos un poco cómo es la pelea, el rival (contra el que ya te has medido) y tu preparación para el combate. Como sabrás, la inactividad está pasando factura a muchos boxeadores.
-Claro, nunca me confío en mis peleas y menos ahora. Ya estoy en la última parte de la preparación, todo va muy bien, terminando de bajar de peso; me siento en gran forma y con muchas ganas. Creo que mi rival no puede haber tenido mejor entrenamiento que el mío, porque estoy trabajando con un equipo multidisciplinar: tocamos diferentes áreas como psicología, nutrición, kinesiología, forma física, etc. Llego muy bien física y boxísticamente, sin estar confiado, pero sí enormemente preparado.

-Aunque tienes que estar centrado en la pelea que viene, posees dos títulos intermedios WBA y WBO, y además estás clasificado en esos organismos. Con solo 24 años, ¿Cómo ves tu futuro?
-Estoy centrado en esta pelea, pero muy ansioso por lo que vendrá. Quiero hacer alguna defensa de los cinturones para lo importante, seguir escalando en el ranking mundial y tener una chance mundial. Estoy motivadísimo, me veo preparado para cualquiera de los campeones mundiales de mi categoría.

-¿Ya te ves en 2021 peleando por un mundial o necesitas un paso intermedio?
-Si tú me preguntas, yo escogería pelear ya en este año por algún título mundial. Como te decía, he entrenado con lo mejor del boxeo en estas categorías, Andrew y Jason Moloney están arriba, luchando por campeonatos del mundo contra los más grandes, como Naoya Inoue. He hecho dos preparaciones con ellos, la que te dije de Las Vegas y otros tres meses en Australia, así que me siento en gran forma porque codearse con los mejores te ayuda mucho.

-Hablando de eso, has peleado toda tu carrera en Chile, excepto un combate allí en Australia. ¿Cómo fue esa experiencia?
-Fue en 2019, cuando estuve tres meses allí con ellos, Bruno Tarimo o Billel Dib, boxeadores todos ellos bien colocados en listas mundiales, y aproveché esa preparación para hacer una pelea allí gracias a Tony y la gente de Australia. Salió todo de la mejor manera, muy contento de haber podido estar mejorando con ellos.

-¿Te haría especial ilusión ser el primer chileno campeón mundial de boxeo? No sé si conoces la historia de Benedicto Villablanca y todo lo que pasó con su “casi título”, que hemos contado hace poco en ESPABOX.
-La conozco, la conozco. Estoy trabajando muy duro para superar las barreras que tuvieron boxeadores como él o Martín Vargas, y para mí sería un honor ser el primer campeón mundial chileno. Cada vez estoy con la idea más fija en ello.

«Me siento en condiciones de afrontar un mundial»

-¿Y contra quién te gustaría proclamarte campeón mundial, a quién te gustaría enfrentarte sobre el cuadrilátero?
-Te diría que quiero pelear con cualquiera que esté arriba de los organismos más importantes, ya me siento en condiciones para hacerlo: Rey Martínez, Nakatani, Dalakian, Mthalane… ¡Que venga el que sea! Y ojalá pudiera ser campeón unificado.

-¿Algún ídolo al que te sientas unido por seguirle siempre en sus peleas?
-Por todo lo que ha hecho, Manny Pacquiao.

-¿Cuál es tu estilo de boxeo en general? Más técnico, fajador, larga distancia, guerra total…
-Soy un boxeador técnico, pero también me gusta ser agresivo y buscar la pelea. Creo que hay que aprender a trabajar todas las distancias: la corta, la media y la larga, para tratar de desarrollar al máximo mis capacidades.

-Tenías antes un apodo, pero parece que ahora tienes una nueva denominación. Cuéntanos.
-Me llamaban “Cisa” antes, de más pequeño, porque yo venía de Cisarro, población de alguien que tenía problemas con la justicia, no me gustaba mucho. Y ahora la gente de Australia me llama “Cocodrilo”, porque dicen que soy como ellos, cuando veo sangre ya no suelto a mi presa (ríe).

-Una pequeña anécdota: se montó mucho revuelo hace unos meses en tu país porque apareciste en un videojuego de boxeo. Cuéntanos un poquito el asunto, que denota tu estatus de estrella.
-Claro, muy contento por eso. Me llena de orgullo aparecer en un videojuego, porque aquí en Chile solamente aparecen los futbolistas, y que alguien estuviera interesado en utilizar mi imagen fue muy gratificante, la verdad.

-¿Has estado alguna vez en España?
-Me gustaría mucho conocer Europa, estoy seguro de que alguna vez podré viajar por vuestra tierra.

-En pocos días subes al ring. Como será imposible seguir tu combate desde España, te deseamos toda la suerte del mundo y te damos la oportunidad en ESPABOX de despedirte dirigiéndote a nuestros aficionados, y también los de Hispanoamérica, donde también tenemos muchos lectores.
-Primero de todo, muchas gracias por vuestro tiempo y darme la oportunidad de esta entrevista para darme a conocer. Que la gente esté atenta, porque muy pronto estaré en boca de los aficionados, porque Andrés Campos va para todo a nivel mundial.

Mucha suerte y a cumplir tus sueños.