Daniel Areces
@DArecesGlez

El pasado 9 de mayo, Nicolás González (6-0, 5 KO) agotaría por primera vez todos los asaltos ante un rocoso Santos Medrano, llevándose por consiguiente su primera victoria a los puntos. Combate difícil pero que supo solventar con autoridad el púgil natural de La Cabrera, además de adquirir una experiencia muy importante.
Eso condujo a su equipo, Guantes de Lobo, a sumar un grado más de dificultad para el siguiente compromiso. Este será el próximo 30 de mayo en el Pabellón Municipal de Daganzo (Madrid) donde además de Nicolás González, se darán cita Cristian Morales y el debut de Cristian Vélez en el terreno rentado.

Esa mencionada dificultad se traduce en Alex Bone, su siguiente rival. Para ello, Álvaro Gil-Casares manager de Nicolás González, comenta a ESPABOX lo que supone este enfrentamiento: “Hemos pensado que es el momento de dar un paso más en la carrera de Nico. Después de boxear con un rival tan duro como Santos Medrano y no llevarse ningún golpe importante, creemos que es el momento de enfrentarnos a Alex Bone. Marcos Badal, nuestro entrenador, y yo estuvimos hace tres años en Navalcarnero viendo a Bone ante Rubén Nieto, y después de ver la valentía y garra que tiene, nos hemos decidido por él. Teníamos otras dos opciones pero una era bastante más alto de peso y otra un debutante, así que el domingo se lo propuse y han aceptado, así que vamos a por ello. Va a ser una guerra, seguro”.

Por su parte, el propio Nicolás comenta a ESPABOX sus impresiones de cara a este choque: “Creo que es un buen combate y ante un buen rival, que me ayudará a seguir creciendo como boxeador. Ahora solo falta que la afición responda y llene el pabellón para ver esta gran pelea”.
Choque de locomotoras, duelo de pegadores, llámenlo como quieran, pero se trata de un combate de resultado incierto y que supondrá, en caso de victoria, un golpe sobre la mesa en la carrera de Nicolás González de cara a plantearse objetivos más ambiciosos.