Leopoldo Bonías

El presidente de la Junta Electoral, Xavier Montalt nombrado por el Director General de Deportes , el bibliotecario del ayuntamiento de Gandía de dudosos conocimientos en Deporte, Josep Miquel Molla (Compromís), se negó el sábado a dar inicio a la jornada electoral a la hora prevista con el argumento de que faltaban tres componentes en las mesas electorales.

Aún cuando el sorteo de los componentes de las mesas electorales se realizó en el mes de julio, no fue hasta la tarde anterior al día de las elecciones cuando comenzaron a llamar aleatoriamente a personas del censo sin tener en cuenta si tenían o no la condición de candidatos e ignorando los resultados del sorteo.

Sólo uno de los cuatro miembros que debían encontrarse en las mesas electorales compareció a la sospechosamente tardía llamada de la Consellería.

El Sr. Montalt dio un penoso espectáculo al negarse a dar la mano al candidato Leopoldo Bonías en una clara muestra de animosidad hacia su persona que lo incapacita para el cargo de presidente de la Junta Electoral -de hecho fue recusado y el Sr. Molla (Compromís) negó la enemistad manifiesta del personaje en cuestión- dando a los deportistas allí presentes un ejemplo de lo que no se debe hacer. La Dirección General de Deportes del Sr. Moya (Compromís), debe ser un referente de deportividad para los integrantes de las diferentes federaciones y no de malas maneras.

Al solicitarse que constase en acta los nombres de las personas a las que se les prohibía votar para abandonar la Federación y adoptar las medidas legales que se estimasen procedentes, el Sr. Montalt ofreció cuarenta euros al que se quedase a formar parte de las mesas electorales, oferta económica que rechazaron todos los allí presentes.

Finalmente , la cordura de la funcionaria que auxiliaba al Sr. Montalt , hizo posible se realizase la votación y el Sr. Montalt pasó a ser auxiliar de la funcionaria que a partir de ese momento tomó acertadamente las riendas de la jornada electoral.

La mala fe de la Dirección General de Deportes se puso de manifiesto al avisar con menos de 24 horas de antelación a los presidentes de las mesas electorales , así como por los intentos del Sr. Montalt para que no se iniciasen las votaciones con el argumento que eran antirreglamentarias sin la presencia de un presidente de mesa para cada urna.

Sin embargo, lo que era totalmente ilegal a las 10 de la mañana era completamente lícito a las 10.30 horas lo que delata claramente la intención de dinamitar las elecciones por parte de la Dirección General de Deportes que dirige Josep Miquel Molla (Compromís).