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A sus 25 años, el boxeador natural de San Antero (Colombia) y residente en Vitoria-Gasteiz, Fran Mendoza, se impuso por amplia decisión unánime de los jueves tras ocho entretenidos asaltos disputados ante los ojos de uno de los poderosos del pugilismo mundial, Eddie Hearn, que siguió el la pelea en primera fila. El Mendoza-Mejía abrió la cartelera emitida por la cadena internacional DAZN del evento Lejarraga-Metcalf promovido por la corporación británica Matchroom.
Las prestaciones del pupilo de José Luis Celaya y Andoni Alonso en el Gasteiz Sport fueron ponderados por los comentaristas y jaleados en las redes sociales. “Me sentí a gusto. Mejía no dio un paso atrás, plantó batalla y creo que ofrecimos un combate que gustó al público”, valora el hermano pequeño del gran Natxo Mendoza. Mejía bordeó la necesidad de una cuenta en varias fases del pleito pero mostró una excelente preparación, tiró de recursos y recurrió a la bravura en los momentos en que fue exigido hasta el límite.
El boxeo ofensivo de Fran agradó a los intendentes de la poderosa Matchroom. No sería una sorpresa que volviera a ser llamado para un nuevo compromiso en una cartelera de la promotora. De momento, lo que es una realidad es el salto de Mendoza en las clasificaciones de la base de datos internacional de boxeo BoxRec, referencia del pugilismo mundial. Fran se ha situado como número 1 del ranking cafetero del gallo y ya está en el Top 50 mundial.
“Me hace mucha ilusión. El lunes comenzaré a entrenar a tope de nuevo. Sería muy bonito regresar a una velada de Matchroom, claro. Estaría encantado de poder pelear también por el campeonato de Colombia, en el gallo o el supergallo; aunque sé que no sería fácil porque hay muy buenos boxeadores, muy complicados”, asegura un Mendoza que aún no cuenta con los requisitos para competir por el campeonato de España.
