El kazajo Zhanibek Alimkhanuly (16-0, 11 KO) volverá a los cuadriláteros el próximo mes de marzo para defender sus títulos mundiales del peso medio. El púgil es campeón de dos organismos, IBF y WBO. En su último combate, que data del mes de octubre, Alimkhanuly solamente defendió el título IBF ante el neozelandés Andrei Mikhailovich, un rival que la WBO no consideró digno de ser aspirante mundial. Como se da la circunstancia de que el asiático tuvo que retirarse de una defensa anterior por una hospitalización derivada del corte de peso final en semana de pelea, se decía que el organismo puertorriqueño podría retirar el cinturón mundial al campeón, algo que no ha sucedido.

Sin embargo, se intuye que el aspirante tendrá que satisfacer a la WBO y habría de ser su primer contendiente de dicho estamento. Este no es otro que Denzel Bentley (21-3-1, 17 KO), que ya peleó con Alimkhanuly en 2022, con decisión unánime como resultado. A este hecho se une que el británico no está clasificado para la IBF, por lo que se especula que el segundo de las listas WBO, Shane Mosley Jr. (22-4, 12 KO) podría ser el rival del kazajo, puesto que es el tercer principal contendiente IBF.

Después de este combate, y en caso de probable victoria ante cualquiera de esos dos asequibles aspirantes, Alimkhanuly quiere unificar las coronas con el campeón mundial WBA, Erislandy Lara, o el WBC, que saldrá del choque este 22 de febrero entre Carlos Adames y Hamzah Sheeraz.