Darío Pérez
@Ringsider2020
La madrugada del sábado al domingo sucede algo que los aficionados al boxeo esperamos un par de veces al año con muchas ganas: Terence Crawford (36-0, 27 KO) estará en acción.
El de Omaha, zurdo de 33 años, es uno de los mejores boxeadores de todos los pesos desde hace un lustro, si no más, y hace más de cuatro años que siempre que se ha subido al ring ha salido vencedor por KO. Sus víctimas en este periodo van desde José Benavidez, un invicto al que retiró, a Julius Indongo, Jeff Horn, Amir Khan o Egidijus Kavaliauskas.
Es el más claro ejemplo de que se puede ganar antes del límite sin ser un «tirapiedras», algo que muchos aficionados afean a boxeadores como Deontay Wilder por confiar todo a una mano aislada; Crawford vence por acumulación de castigo, con frecuentes combinaciones que llegan al rival mientras entra y sale fuera de la distancia de brazos ajenos y cambia de guardia. Sin prisa, pero sin pausa. El pleito supone la cuarta defensa de su cinturón WBO wélter, siendo esta la tercera categoría en la que es campeón del mundo.
Su rival es el británico Kell Brook, diestro, 34 años y 39-2, 27 KO como tarjeta de presentación. Dos derrotas, sí, pero ante Errol Spence y Gennadiy Golovkin (en un peso medio que le quedó muy grande para su fisonomía); por contra, su victoria más importante llegó en 2014, cuando frenó en seco la ascensión de un Shawn Porter que parecía intocable en aquellos tiempos, proclamándose campeón mundial wélter IBF.
Cierto es que sus triunfos desde entonces han sido ante púgiles un par de escalones por debajo de los mejores del wélter y el superwélter (categoría de la que baja para este sábado), pero es un boxeador que puede ofrecer un buen combate a un mastodonte boxístico como Crawford. Habrá presencia española en su esquina, ya que Brook trabaja con el entrenador español Carlos Formento, en quien ha depositado toda su confianza.
La gran promesa del boxeo mundial Vergil Ortiz, que anunció a ESPABOX esta semana sus planes para 2021, estará muy atento al combate, ya que se sitúa el número dos del mundo en las listas WBO de la categoría.
El combate de semifondo de la velada dilucidará el campeón WBA «regular» supermosca. Joshua Franco (17-1-2, 8 KO) y Andrew Moloney (21-1, 14 KO) reviven el duelo que ya mantuvieron en junio, un combate cerradísimo que decidió una caída de Moloney en el undécimo asalto. Se presenta igualado y apasionante, aunque el vencedor tendrá que esperar su oportunidad para el mundial «real», porque el supercampeón «Chocolatito» González buscará una unificación con el «Gallo» Estrada en su próximo combate.
La velada cuenta también con los habituales combates previos en los que podremos seguir vigilando la evolución de las mejores caras jóvenes de Top Rank, promotora del evento, como Elvis Rodríguez, Raymond Muratalla y otros púgiles.
El evento, que se disputará en el MGM Grand de Las Vegas a puerta cerrada, podrá seguirse en directo mediante la modalidad de pago por visión en FITE. El precio, unos 8’50 euros. Se puede contratar aquí.
