El mexicano Julio César Chávez Jr. (52-6-1, 34 KO), que perdió hace unas semanas en la gala de retirada de su padre ante un rival no boxeador, no piensa colgar los guantes.

De hecho, su idea es contraria: «Quiero llegar a las cien peleas. Será difícil y tendré que boxear varias veces al año, incluso gratis. Hoy es muy difícil alcanzar los cien combates, pero no dudo de que se puede conseguir».

Parece que el Júnior no sigue los consejos paternos, ya que su progenitor, viendo el bochornoso espectáculo que está dando últimamente, le pidió que dejase la práctica activa del pugilismo.

Chávez Jr., que fue cuatro veces campeón del mundo del peso medio y parecía hace una década poder llegar a calzarse los enormes zapatos que su padre había dejado vacíos para México, lleva cuatro derrotas en sus seis últimas apariciones, y ha tenido problemas de abusos de sustancias prohibidas y exceso constante de peso antes de sus combates, entre otras dificultades.