Con el paso de los días, las negociaciones para que Tyson Fury y Oleksandr Usyk se enfrenten esta primavera están cerca de romperse. Las exigencias del británico han cansado al equipo del ucraniano, que cree que Fury no quiere boxear con Usyk.
A la espera de lo que hagan los dos grandes nombres del peso pesado se encuentra Deontay Wilder, que no tiene ninguna pelea confirmada a la vista. El estadounidense ya cruzó guantes con el inglés en tres ocasiones, pero todavía no ha compartido ring con Usyk.
Shelly Finkel, mánager de Wilder, confirmó que «El Bombardero de Bronce» está dispuesto a aceptar un duelo con Usyk. Wilder tuvo sobre la mesa una pelea con Andy Ruiz, pero tampoco se alcanzó un acuerdo.
Si finalmente el combate con Fury no se produce, Usyk tendrá que afrontar sus obligaciones como campeón mundial del peso pesado WBA, WBO e IBF, ya que además de enfrentarse a Daniel Dubois, aspirante oficial de la WBA, el resto de organismos podrían ordenarle nuevas defensas obligatorias.
