Vendaje Duro
Damian Esquisabel venció por puntos en su debut a Javier Gilabert, en un combate que el catalán nunca mereció perder.
Buena entrada de publico, en el Polideportivo Pedro Velarde (Maliaño) para presenciar la velada organizada por la Promotora Daniel Rasilla, con nueve combates amateur, y el combate de fondo, con el debut en el campo Profesional del cántabro Damián Esquisábel.
No fue la noche soñada por el cántabro, después de muchos meses de duro trabajo, puesta a punto, y sacrificio preparando este combate, quizás, el de mas compromiso, (que no, el mas importante, quede claro) para un púgil, en esa puesta de largo para cruzar el umbral que dice adiós a la camiseta, la que durante 43 combates y tantos años le acompaño por todos los cuadriláteros, para entrar ahora en el mundo del boxeo rentado, el boxeo profesional.
Pero anoche, había un segundo adversario sobre el ring de Maliaño, un adversario invisible que atenaza los puños de muchos púgiles (no a todos) el día de su debut, los nervios, ese invitado que nadie quiere, pero que siempre esta ahí en fechas tan señaladas para un púgil, como la de anoche.
Damian Esquisábel salió al ring completamente atenazado, sin ideas, sin un planteamiento de combate definido, dándole todas las facilidades a Javier Gilabert que pese a ser infinitamente mas bajo que Damián, conectaba su directo de izquierda una y otra vez, bajo la perpleja mirada de la esquina del cántabro, que veía además que durante el 3º y 4º asalto, como, el propio Esquisábel buscaba la pelea en corto, un descalabro para un hombre que ronda el 1´90 con 67 kg en la bascula, pero, así era.
Todo estaba fuera de si, menos mal que Gilabert no es un púgil que cuente con muchos argumentos boxísticos, ya que tiene una escasa gama de golpes, eso facilito que Damián aun con todo, también conectase algunas manos al catalán, golpes por otra parte, sin mucha contundencia por ninguno de los dos púgiles durante todo el combate.
El combate cara al publico, dicho lo acontecido sobre el ring, careció de esa chispa que llega a las gradas y acelera las pulsaciones del publico, por lo que se agradeció que fuese a 4 asaltos, y no a mas.
El veredicto final, victoria a los puntos para el púgil local Damián Esquisábel, ante la incredulidad del púgil catalán, que se quedó en el ring para pedir explicaciones al árbitro, buscando también la complicidad del publico.
Pero, visto lo acontecido sobre el ring, Javier Gilabert no mereció anoche bajar del cuadrilátero con una derrota, a si lo creo, y así lo entendió también, una gran mayoría del publico asistente.
En cuanto a Damian Esquisábel, por mi parte le diría que hay que pasar pagina sin más, estas cosas suceden, y seguirán sucediendo, los Nervios a veces, juegan malas pasadas, lo saben bien grandes púgiles amateur del boxeo Mundial, que han tenido tu misma experiencia el día del debut, para posteriormente tener unos palmares envidiables, con grandes títulos en su cintura, la cabeza bien alta y a seguir para adelante, lo de ayer, ya es pasado, y el sol, sale todos los días.
Estos son los resultados de los combates amateur que antecedieron al combate de fondo:
Cristina Mena (Gym Rasilla) vence por puntos a María Vilas (Galicia)
Teo Greanga (Bilbao) vence por puntos a Diego González
Naira Olmedo (Club Izarrak) vence por puntos a Diana de Miguel (Gym Rasilla)
Victor Flores (Bilbo Box) vence por puntos a Alberto García (Club Olimpico Barquín)
Halid Hazariuh (-) vence por puntos a David Campillo (Gym Rasilla)
Rodrigo Fernandez (Gym Rasilla) vence por puntos a Mario Díez (Club Golden Glove)
Adrian Señaris (Galicia) vence por puntos a Rubén Prieto (Team Roqueñi)
Mari Luz Peral (Gym Rasilla) vence por puntos Miren Sánchez (Bilbo Box)
Álvaro Senties (Gym Rasilla) vence por Abandono a Jorge Álvarez (Club Tomás Ruiz)