Redacción
Ayer sábado en el Gimnasio del Rayo Vallecano de Madrid, PCI Promotions organizó una velada mixta con cuatro combates de boxeo profesional, ante cerca de cuatrocientos espectadores.
El cántabro Bruno Macho (3-0, 1 KO) se impuso tras cuatro asaltos en el peso supergallo al rumano Stefan Nicolae (3-50-2, 1 KO). Macho, con un boxeo más nítido y directo, dominó desde el inicio y logró derribar al foráneo con una buena combinación acabando el primer asalto. Sin embargo, los constantes agarres del rumano, que debió ser amonestado, afearon la pelea. Macho fue muy superior excepto cuando el rumano le lograba sacar del combate, imponiéndose por doble 40-35 y 39-36.
En el peso superligero, David Gómez (1-1, 1 KO) cayó ante Eduar Guzmán (1-15, 1 KO), que se estrenó con victoria como púgil profesional, con KOT en el primer asalto. Gómez, de mucha mayor envergadura que un rival habitualmente en categorías inferiores, llevaba bien el envite en el primer round marcando con el jab cuando un golpe descendente a la frente le trastabilló y llevó contra las cuerdas. Ante la escasa respuesta de Gómez y su estado, el árbitro Lázaro Carrasco consideró que era mejor parar el combate, decisión protestada por Gómez.
La hondureña Keylin Maradiaga (6-0-1, 2 KO), del equipo madrileño de Emil Pop, empató tras cinco asaltos en el peso minimosca con la italiana Federica Macri (1-0-1, 0 KO). Al menos, eso dictaminaron los jueces en un bochorno que nadie se creía en el recinto, con un tremendo abucheo al leer las cartulinas. Macri fue superior a lo largo del combate, llegando con manos más claras y dominando la pelea. Las puntuaciones de doble 48-48 y un 48-47 que desconocemos a quién favoreció al no leerlo el presentador de la gala fueron desafortunadas. Un auténtico desatino el de los jueces madrileños que barrieron para casa.
También presenciamos al semipesado ucraniano Daniel Lapin (9-0, 3 KO), que estaba en el campamento de Oleksandr Usyk preparando el pleito contra Tyson Fury. Superó al montenegrino Almir Skrijelj (19-9, 9 KO) sin problemas, tras tres caídas en dos rounds. La parada arbitral fue más que necesaria.
