Daniel Pi
@BastionBoxeo

En la noche del viernes, en l’Espace des Trois Provinces de Brive-la-Gaillarde (Francia), el excampeón de España del peso wélter José Del Río (28-8-1, 7 KO) ofreció una actuación llena de coraje y de voluntad, pero la destreza del campeón de la Unión Europea del peso wélter Jordy Weiss (21-0, 3 KO) finalmente se impuso, logrando el monarca retener su título por decisión unánime. Las puntuaciones fueron de 118-110 y de doble 117-111, siendo todas ellas demasiado amplias, ya que Del Río capturó, sin duda alguna, más de dos asaltos, dejando muy buena impresión en los comentaristas franceses.

El combate se inició con una oscilación en la posesión de la iniciativa, estando la presión de uno y otro contendiente supeditadas a su efectividad con golpes de poder, usando Del Río su directo de izquierda al rostro enlazado con el gancho diestro al cuerpo y Weiss realizando esporádicas arremetidas con curvos de ambos manos. No obstante, el español se mostró más incisivo en adelante, impactando de nuevo la combinación recto de izquierda arriba-hook diestro al torso, golpes con los que alcanzó repetidas veces a un Weiss que también ofreció buena respuesta con los directos pero que no encontraba ni los tiempos ni los espacios para pensar y desplegar su mayor habilidad.

La pelea ganó intensidad, y en el cuarto asalto el avance de Del Río, que encerraba contra las cuerdas salteadamente a su rival, se encontró con fuertes contragolpes del francés, que en ese round empezó a usar sus explosivas combinaciones habituales. Con renovado ímpetu, en el quinto episodio Del Río intentó insistentemente castigar el torso de su adversario pero, manteniéndose la igualdad, el local, que padeció un corte en el párpado derecho, impactó durísimos uppercuts y ganchos zurdos, saliendo de la presión con pasos hacia la izquierda.

La contendida pugna se estabilizó en esta tendencia, con Del Río atacando con enorme empeño y una apreciable frecuencia y con Weiss buscando menos numerosos pero precisos y contundentes contragolpes, a la vez que intentaba contener el castigo con acciones defensivas.

En ningún momento, a pesar de tener el rostro bastante enrojecido, el boxeador de Palma de Mallorca bajó los brazos o cedió ante los brutales puños ascendentes de su rival, mostrando gran coraje avanzando sobre sus izquierdas rectas y sus series de curvos y encajando con mucha entereza las velocísimas combinaciones de Weiss. Con todo, las manos del titular resultaban bastante más claras y, como siempre, Weiss supo evitar regalar asaltos repartiendo sus fugaces combinaciones de forma astuta a lo largo de los rounds, algo que, peleando además como local, hizo que en los momentos de más igualdad los episodios se decantasen de su lado.

Alcanzado el último tramo, Del Río impactó dos buenas izquierdas, pero fue contestado de manera muy severa por su oponente, aunque, a pesar de sufrir además una hemorragia nasal, siguió atacando y haciendo todo lo que estuvo en su mano, dejando asaltos igualados o incluso capturándolos, hasta el tañido final.

Con esta segunda defensa de su cinturón, el invicto Weiss pone sus miras sobre el título de campeón de Europa del peso wélter que posee Kerman Lejarraga, cinto que considera un paso adelante inevitable en su trayectoria que debe dar más pronto que tarde.

Ciertamente, tras este triunfo, la EBU le situará en la cúspide de la lista, de modo que, en caso de que el aspirante oficial Ceferino Rodríguez no desease la oportunidad por el máximo cinturón continental, seguramente Weiss sería nombrado retador obligatorio de Lejarraga, que podría ser el cuarto español al que el francés se enfrenta en su trayectoria profesional. Con todo, aunque Weiss es rápido, móvil y tiene grandes detalles técnicos, la pegada, la fortaleza, la experiencia y la solidez del “Revólver” parecen un muro demasiado alto para el boxeador residente en Laval, que partiría muy por detrás en las apuestas.