Emilio Marquiegui
@EmilMarquiegui
Fotos: Esther Lin/Showtime
El púgil de Filadelfia Stephen Fulton (21-0, 8 KO) retuvo sus dos coronas mundiales del supergallo (WBC-WBO) con autoridad, ante el ex campeón mundial de Los Ángeles Daniel Román (29-4-1, 10 KO), anoche en el Armory de Minneapolis, repleto de espectadores.
El aspirante salió presionando desde el inicio, pero Fulton, bien plantado, con su buen jab, fue controlando la situación y el ritmo de la pelea. La buena movilidad y esquivas hicieron que Fulton ya empezara a preocuparse por el aspecto ofensivo y comenzó a llegar bien con rectos precisos.
Román seguía buscando a Fulton, pero no podía fijarle y no le alcanzaba con manos claras. A partir del séptimo asalto, el aspirante subió el ritmo y llegó bien en el noveno, pero Fulton volvió a coger el volante de la pelea y realizó sus mejores asaltos de ahí al final, terminando muy superior.
Las puntuaciones de los jueces fueron demostrativas, 120-108, 120-108 y 119-109, no dando dos de los jueces ningún asalto a Román.
“Era muy importante controlar la distancia esta noche”, dijo Fulton. “Como comenté antes, en la última pelea con Brandon Figueroa no tenía la energía porque no di el peso de la manera correcta. Así que grite a mi dietista y estoy mejor».
“No hay excusas. Fulton sabía cómo usar su distancia”, dijo Román. “Fue difícil para mí adaptarme. Entró y salió. Cambió su estilo, así que fue complicado”.
Ahora Fulton quiere unificar las cuatro coronas ante el uzbeko Akhmadaliev, que tiene los cinturones WBA-IBF.
“Ya sabes lo que sigue”, dijo Fulton. “Quiero a Murodjon Akhmadaliev Tengo que terminar esto. Pero mucho respeto para Danny Roman. Mucho respeto.«
