Daniel Pi
@BastionBoxeo

Su condición de visitante y los grandes planes de futuro que se tenían para su adversario eran escollos muy difíciles de superar en el camino al triunfo pero, en la noche del sábado en el O2 Arena de Londres (Reino Unido), el español Sergio García (29-0, 13 KO) ofreció una actuación sensacional en una extraordinaria batalla para derrotar por decisión unánime al valiente británico Ted Cheeseman (15-1, 9 KO), reteniendo así el de Torrelavega por primera vez su cinturón de campeón de Europa del peso superwélter. Las puntuaciones fueron de acertado doble 119-109 y de un 115-114 simplemente injustificable.

Con mucha intensidad dio inicio el combate, produciéndose una pugna por el centro del ring en la que García lanzó un buen número de manos, especialmente con series de rectos, ante un Cheeseman que se cerraba bien pero que también sacaba peligrosos pero menos cuantiosos golpes de poder. Tras un interesante y emocionante primer asalto, el segundo round dejó también duros cruces de golpes, llegando muy bien García con su gancho zurdo y con derechas tanto avanzando como retrocediendo, si bien el español pareció tener claro que si mantenía su habitual desbordante frecuencia de golpeo el británico no iba a poder desplegar su mejor trabajo de hostigamiento, por lo que se mantuvo muy activo.

Dado que el duelo no estaba desarrollándose de la manera que Cheeseman podía preferir, en el tercer asalto aceleró sus pasos intentando con sus derechazos empujar hacia las cuerdas al campeón, pero “El Niño” anotó clarísimos rectos a la contra que provocaron una hemorragia nasal al local, que pese a ello no cesó en su esfuerzo y su avance. Aun así, durante la primera mitad, acompañando su gran volumen de golpes y su continuo desplazamiento con buenas acciones defensivas, García se estaba imponiendo de forma extremadamente convincente.

Los uno-dos de García siguieron perforando una y otra vez la guardia de “The Big Cheese” y el estado de su nariz fue a peor, aunque el retador, tirando de formidable coraje, continuó llegando con directos de mano adelantada y potentes ganchos que, pese a ello, en nada modificaron el extraordinario trabajo del titular. Teniendo en cuenta que el ritmo de la pugna era increíble parecía de esperar que los contendientes aflojasen su combatividad, pero Cheeseman siguió avanzando con tenacidad y García alcanzándolo con nitidez y frecuencia con su uno-dos-gancho mientras retrocedía.

En el octavo round Cheeseman encontró el camino para anotar combinaciones de curvos y derechas muy fuertes que parecieron dañar un tanto a García e hicieron reaccionar al público, pero el monarca de Europa resistió y explotó el desgaste que supuso para su adversario el mencionado repunte ofensivo para terminar el asalto persiguiendo al inglés. Al margen de los apuros parciales del octavo asalto, García siguió martilleando el inflamadísimo rostro de un Cheeseman que con un tremendo encaje avanzaba (incluso bajando sus manos) a través del intenso castigo al que era sometido, pero su afán no pudo truncar la perfecta pelea que estaba ofreciendo el cántabro, que siguió quitándose manos y contragolpeando con enorme eficacia hasta el final.

Aunque el riesgo que suponía esta puesta en juego no era nada pequeño, la ganancia potencial superaba por mucho el peligro, ya que, además de la bolsa, García ha añadido a su récord como visitante el nombre de un boxeador invicto, conocido e incluso bien valorado en las Islas Británicas en un enfrentamiento épico que no sólo ha sido televisado por Eurosport en España y en Sky Sports en Reino Unido, sino que también ha sido emitido en Estados Unidos, Canadá y otros países por DAZN.

Así, teniendo en cuenta que antes de esta pugna “El Niño” era 4º WBC, 10º WBO y 14º IBF, mientras que Cheeseman era 14º WBA, la victoria debería permitirle posicionarse excelentemente en las listas mundiales y surgir en los planes de muchos promotores y de los contendientes en la lucha por el mundial, todo ello a la vez que ha mostrado al público extranjero de lo que es capaz.

Dado que en el éxito de la carrera de un púgil una de las piezas clave es la cantidad de oportunidades entre las que elegir, García ha cumplido su cometido y ha contribuido enteramente a expandir sus opciones, estando ahora en su mano y en la de su equipo escoger entre superar ahora su defensa obligatoria (el aspirante oficial según la EBU es todavía Zakaria Attou) y extender su reinado continental para preparar con garantías los máximos retos o aprovechar el impulso que el triunfo ante Cheeseman le ha dado para intentar luchar cuanto antes en una eliminatoria mundialista.

Tras el enfrentamiento García expresó su alegría y dio su agradecimiento a su pareja, a su familia, a su equipo y a todos los que se desplazaron hasta Londres para apoyarle, añadiendo con una sonrisa que esperaba que éstos hubiesen ganado mucho dinero en las apuestas. Finalmente, preguntándole el entrevistador qué esperaba a continuación y si estaba dispuesto a pelear en un mundial, García se limitó a señalar que ahora quiere descansar y que lo que le venga será bienvenido.