José Manuel Moreno
@josemorenoco

Este sábado va a tener lugar uno de los combates más extraños a priori de los últimos tiempos. Se miden un doble campeón olímpico (del peso pluma en Pekín 2008 y del peso ligero en Londres 2012) sin ninguna experiencia en el campo profesional, como es el ucraniano Vasyl Lomachenko contra un veterano de guerra, curtido en mil batallas como es el campeón del mundo del peso pluma de la WBO, el mexicano Orlando «Siri» Salido (40-12-2, 28KO).
Este último, de 33 años, no era favorito en ninguna de sus dos combates ante el entonces inexpugnable Juanma López, y en más un su casa de Bayamón, Puerto Rico. Las dos veces salió con el brazo en alto. Ahora llega este fenómeno ucraniano de solo 26 años y con un solo combate profesional, el que disputó ante un buen boxeador como es José Ramírez el pasado 12 de octubre, al que le ganó en cuatro asaltos, y resulta que es el favorito en las apuestas, en proporción de 1 a 3, y para la mayoría de comentaristas y aficionados.

Esta situación le recuerda a Salido a otras similares que ha vivido anteriormente. Y no se arredra. Sin duda, este sábado en el fastuoso Alamodome de San Antonio, Texas, se vivirá el enésimo combate de toda la vida: duro fajador vs fino estilista.