Manuel Valero
@Manu_Valero
Guillermo Rigondeaux (15-0, 10 KO) tuvo que sufrir para salir victorioso de Osaka ante el japonés Hisashi Amagasa (28-5-2, 19 KO).
El cubano salió a estudiar a su rival, 17 centímetros más alto que él, controlando la pelea con su jab y sus rectos al cuerpo. Amagasa empezó muy tranquilo, hasta que en el tercer asalto acortó distancia, cerrando a Rigondeaux que intentaba salir con buenas combinaciones. El japonés no se desquició al ver que no era capaz de llegar continuadamente al “Chacal”, aumentando el ritmo en el sexto round.
Rigondeaux decidió quedarse en la corta distancia, a pesar de que el japonés empezaba a llegar al campeón mundial supergallo WBA y WBO. Al final del séptimo asalto, Amagasa derribó a Rigondeaux con una derecha, quedando el cubano dañado, volviendo a caer en los segundos finales.
Amagasa era consciente de que podía destronar al campeón que no se recuperó del todo, buscando la corta distancia. Rigondeaux respondía con certeros rectos, derribando a Amagasa en el noveno asalto.
El japonés acusó el desgaste del combate y no pudo seguir el ritmo del cubano, que ya le había dejado la cara muy marcada. Rigondeaux metió una marcha más con el local menos combativo. Amagasa no salió al decimosegundo asalto, en una decisión comprensible por parte de su esquina debido al estado de su rostro. El japonés demostró ser un bravo rival ante un Rigondeaux que sufrió más de lo esperado en una entretenida pelea.
El cubano demostró que también puede quedarse en el centro del ring, esperando a los grandes nombres para el nuevo año en Estados Unidos.
En la misma velada, Katsunari Takayama se hizo con los cinturones mundiales del peso paja vacantes IBF y WBO tras noquear en el séptimo asalto a su compatriota Go Odaira.
En Tokyo, Takashi Uchiyama volvió a defender con éxito su título mundial superpluma WBA ante el argentino Israel Pérez, que no salió al décimo asalto.
