Daniel Pi
@BastionBoxeo

Un año más, no han transcurrido ni dos semanas de parón entre los grandes encuentros finales de una temporada y los primeros de la siguiente, ya que tras la velada de Macao del día 31 de diciembre sólo se deberá aguardar hasta el próximo domingo 13 para volver a ver en un cuadrilátero una pugna por una corona mundial. Si a ello le sumamos que en diversas partes del mundo la temporada 2019 ya ha comenzado días atrás con diversas peleas sin título en juego, se vuelve a poner de manifiesto que el boxeo es uno de los deportes más activos, ya que en la práctica casi nunca descansa.

Regresando al primer campeonato del año, éste se producirá en el Microsoft Theater de Los Ángeles (Estados Unidos), recinto con capacidad para 7.100 espectadores que acogerá un enfrentamiento por la corona mundial IBF del peso supermedio sumamente interesante, puesto que es uno de los mejores encuentros posibles de la división dejando de lado las unificaciones. Y es que el campeón venezolano, residente en México, José Uzcátegui (28-2, 23 KO) (en la foto), conocido por su agresivo boxeo, se enfrentará a quizás el boxeador más elusivo y técnico de la categoría, el aspirante obligatorio estadounidense Caleb Plant (17-0, 10 KO), perfilándose un choque de estilos del máximo calibre.

Este duelo, que dará el pistoletazo de salida al atestado calendario que ha planeado para 2019 FOX Sports 1, contará además con enormes alicientes para los contendientes.

Para Uzcátegui vencer a otro estadounidense bajo las cámaras norteamericanas supondría un hito crucial en su carrera para seguir recibiendo grandes oportunidades, situándose de forma muy favorable para alcanzar las deseadas unificaciones, que incluso empiezan ya a proyectarse para él en la segunda mitad de la temporada.

Por su parte, para Plant, que conseguiría su primera corona mundial y culminaría su objetivo inicial al emprender su carrera boxística, la victoria tendría un gran significado personal, ya que, además de poder aspirar a un buen futuro económico dejando atrás las dificultades por las que pasó su familia, que contaba con pocos recursos, podría lograr coronarse casi en el cuarto aniversario del fallecimiento de su hija Alia, que murió víctima de una enfermedad a los 19 meses de vida el 29 de enero de 2015 y a cuya memoria dedica desde entonces su carrera pugilística.

Con todos estos factores empujando a los boxeadores al triunfo y añadiéndose a ellos algunos duros cruces de palabras que han aumentado la tensión del choque, Uzcátegui y Plant disputan una de las más complicadas peleas de sus trayectorias, tanto desde el punto de vista mental como del combativo.

Con un margen minúsculo en las apuestas, Uzcátegui parte como ligero favorito, ya que cuenta con mayor experiencia de calidad, es más alto y tiene mayor envergadura y es un pegador veloz a la carga y con fluidas combinaciones. No obstante, son muchísimos los aficionados y expertos que piensan que Plant, que batió a Adasat Rodríguez hace tres años (KOT en el 6º), podría lograr el triunfo, dado que tiene un estilo complicadísimo para cualquier púgil y especialmente para uno de las características del monarca.

Esto es así porque el invicto aspirante posee un boxeo extremadamente hábil y eficiente, caracterizado por unos deslizamientos sobre el ring increíblemente ágiles, trazando a su antojo diagonales, giros, cambios de dirección y entradas y salidas, tejiendo así una maraña que confunde y frustra sobremanera a sus rivales, que se ven atosigados por un afilado jab y fugaces combinaciones. Si a ello se suma que sus esquivas tremendamente variadas y plásticas han hecho que peligrosos boxeadores de presión terminen una pelea ante él con un acierto bajísimo (se señala que “Porky” Medina conectó sólo el 16% de sus golpes, traducido en 5,5 puños por round durante 12 asaltos), Plant parece tener una gran posibilidad de éxito.

Sin duda, Uzcátegui, que ha afirmado en diversas ocasiones que pretende darle la paliza de su vida a Plant y que buscará deliberadamente una pelea larga para dañarlo todo lo que pueda antes de noquearlo (aunque quizás esto sólo lo diga porque sabe que difícilmente logrará un rápido fuera de combate), pondrá a prueba el encaje, la resistencia al castigo y la concentración de su oponente, que no se sabe si durante doce rounds podrá resistir las manos más contundentes del titular o si podrá evitar las necesarias para mantener sus energías.

Con todo, tras ver como Uzcátegui pretendía lograr un espectacular KO ante Ezequiel Maderna en su última subida a un ring y se tuvo que conformar con una victoria unánime, ya que el argentino, contra todo pronóstico, aguantó los diez asaltos (Uzcátegui después del combate afirmó, de forma cuestionable, que no lo había noqueado a propósito), no se puede evitar pensar que Plant, si está a su máximo nivel, es astuto a la contra y con dinamismo logra impedir que el monarca asiente los pies para golpearle, podría llegar a neutralizar en la medida de lo posible a su temible adversario.

El evento, que incluirá el regreso a los rings de Guillermo Rigondeaux, comenzará su emisión en Estados Unidos por FOX Sports 1 a las 2:00 de la madrugada del domingo al lunes en hora peninsular española.