José Manuel Moreno
@josemorenoco

Sin ninguna duda, el norteamericano Terence Crawford (25-0, 17 KO) fue el mejor o uno de los tres mejores boxeadores de 2014. El de Omaha, Nebraska, se proclamó campeón mundial a domicilio cuando ganó a Ricky Burns el 1 de marzo pasado en Glasgow. En junio revalidó su corona del peso ligero de la WBO cuando noqueó en nueve asaltos al cubano Yuriorkis Gamboa. Y de nuevo en Omaha, ante un público entregado, volvió a defender su título ante el mexicano Raymundo Beltrán al que venció por decisión unánime el pasado 29 de noviembre. Este currículo le encumbró en todas las clasificaciones como uno de los mejores del año, si no el mejor. «Hunter» ha decidido subir a la división del peso superligero y según el reglamento de la WBO tiene derecho a boxear por el título mundial de esa división, y más como es el caso que su compatriota Chris Algieri fue desposeído de la corona al subir a la división wélter para enfrentarse a Manny Pacquiao.

La intención de Top Rank, que lleva los asuntos de Crawford, es que este vuelva a subirse a un ring el próximo 21 de marzo. Y esta vez no será en su tierra natal, sino en Nueva York, más concretamente en el Theater del Madison Square Garden. Curiosamente, el rival podría ser el propio Algieri, al que la WBO le «obsequió» con el nº 1 de su ranking cuando le quitó la corona. En esa misma velada pelearía el flamante campeón del peso pluma de la WBA, el jamaicano Nicholas Walters (25-0, 21 KO), que tras noquear en octubre de forma tan formidable como sorprendente a todo un campeonísimo como Nonito Donaire hay muchas ganas de verlo de nuevo para ver sin confirma sus dotes de gran pegador. Su rival podría ser el puertorriqueño Gamalier Rodríguez (25-2-3, 17 KO) que no pierde un combate desde 2009. La velada, si se confirma, sería respaldada por la cadena HBO.