José Manuel Moreno
@josemorenoco

Cuando el entonces novato promotor Don King convenció al dictador de la República del Zaire Mobutu Sese Seko para poder pagar sendas bolsas de 5 millones de dólares de 1974 a Muhammad Ali y a George Foreman, hubo un antes y un después en el mundo del deporte-negocio llamado boxeo. Si el 2 de mayo próximo suben al fin a un cuadrilátero los dos mejores peleadores de la actualidad Floyd Mayweather y Manny Pacquiao, se romperán sin duda todos los récords de taquilla, bolsas, PPV y de impacto mediático universal. Bob Arum, que supuestamente organizaría la megapelea en colaboración con Óscar de la Hoya y el propio Mayweather, juez y parte con su promotora, ve que se disparan las cifras. La primera pista la ha proporcionado el boxeador que tiene más ganas que se arme el combate, Manny Pacquiao.

Después de ganar con contundencia pero sin brillantez a un flojo Chris Algieri, afirmó tras la pelea, que está dispuesto a enfrentarse al norteamericano para agradar a los aficionados. Y nada más aterrizar en Filipinas, en un ataque de incontinencia verbal que no se da en otros deportes, ha revelado que podría ganar en la hipotética pelea de mayo de 2015 alrededor de 65 millones de euros, algo menos que su endiosado rival, que podría alcanzar los 80 millones. «Las negociaciones están ya en marcha para finalizar posiblemente la pelea con Mayweather en el mes de mayo», comentó Pacquiao. Pero atención, no den nada por hecho, como explica el asesor del filipino, Michael Konc: «Hasta que no escuchemos algo de Floyd no tenemos grandes esperanzas», por lo que deja clara la voluntad de Pac Man y las reservas sobre el interés del boxeador de Michigan. Además, añadió que el filipino «está cansado de hablar siempre del mismo tema, él quiere la pelea no solo por el dinero, sino por el público», aseveró uno de los hombres fuertes del Team Pacquiao. Claro está que hablamos solo de bolsas, a las que habría que sumar el importe de la recaudación de PPV, y más si se hiciera conjunta tanto a través de Showtime como por HBO, con lo que las cifras serían verdaderamente mareantes. Pero en definitiva, falta el «sí, quiero» de Mayweather, que parece la «novia» del enlace deportivo.