El presidente del WBC, Mauricio Sulaimán , ha arremetido a la WBA por su actuación en el caso de los títulos mundiales del peso superligero, en posesión de Josh Taylor hasta hace unas semanas.
Es sabido que la WBA ordenó que Taylor defendiera su título ante Alberto Puello, primer clasificado mundial. También el cuestionable organismo sabía que Taylor no tendría ningún interés en exponer sus títulos ante un rival tan inferior en lo deportivo, y con una potencial bolsa tan pequeña en lo económico, por lo que no estaban otra cosa sino obligándole a dejar el cetro vacante. ¿Para eso buscamos como locos las unificaciones, para obligar a los boxeadores a que abandonen los títulos para que pronto haya otros interesados que paguen las tasas del cinturón?
Por ello, el mandamás del Consejo Mundial de Boxeo ha cargado duramente contra la WBA: «Entre todos los organismos, llegamos a un acuerdo para que Josh Taylor defendiese todos los títulos contra el aspirante WBO, por antigüedad. Tras Jack Catterall, iba José Zepeda (WBC) y luego la IBF. Sin embargo, la WBA ignoró ese orden y ha exigido una defensa de Taylor ante Puello, con una cifra mínima de subasta ridícula, de unos 190.000 euros. ¿Cómo va a pelear Taylor por 100.000 euros si ha ganado bolsas multimillonarias? Y no es la primera vez que lo hacen, cuando teníamos todo acordado para la trilogía entre ‘Chocolatito’ González y ‘El Gallo’ Estrada, ellos ordenaron que este defendiera el título contra el campeón regular Joshua Franco, por 100.000 euros, y nos privaron de esa gran trilogía».
