Guinaldo-Paulsen

Julio González

PRIMERA PARTE

Tommaso Galli había perdido el título contra el alemán Lothar Abend y este lo había perdido contra el noruego Svein Erik Paulsen.

El siguiente español en disputar el título continental fue Domingo Giménez. La pelea fue una defensa voluntaria del noruego, que hacia la segunda ante el catalán; antes había derrotado al italiano Gionnani Girgenti con mucha dificultad.

La pelea se le presentó a Domingo Giménez de rebote al estar enfermo el campeón de España Miguel Molleda. El combate se celebró el 23 de enero de 1975.

Domingo Giménez no pudo conquistar el título al ser derrotado por puntos.
Uno de los principales inconvenientes del español fue la altura del noruego que con 1´75 metros llevó la pelea a la larga distancia, impidiendo que el español se acercara, pero casi al final tuvo al noruego al borde del KO, pero el árbitro italiano Pelloti les separó en demasiadas ocasiones. El triunfo del noruego fue claro y justo, de los quince asaltos el noruego ganó seguramente nueve, dos fueron nulos y cuatro el catalán.

Luego el noruego realizó dos defensas y se situó a las puertas del título mundial que poseía el puertorriqueño Alfredo Escalera, pero antes concedió una oportunidad al salmantino Antonio Guinaldo. El combate se celebró en Oslo (Noruega) el 25 de septiembre de 1975.

El combate se celebró en el Messehallen de Oslo ante seis mil espectadores y esta era una defensa voluntaria que hacía el noruego. El combate fue dominado en la primera parte por el púgil español, y a partir del décimo, el español notó el cansancio y el campeón aprovechó para ir imponiéndose hasta llegar al decimoquinto donde le fue concedido el triunfo por puntos.

Luego el noruego dejo el título continental vacante para disputar el mundial a Escalera, con el que perdió, y el título lo conquistó el francés Roland Cazeaux ante el belga Rudi Haeck, venciendo por puntos.

Hizo la primera defensa el 16 de junio de 1976 contra el canario José Ramón García Marichal, que hizo combate nulo contra el francés. La pelea se disputó en la Plaza de Toros de Tenerife ante seis mil espectadores. El combate fue arbitrado por el belga Sr. Robert Desgain y la tónica del combate fue de igualdad en la totalidad de los asaltos. En el quinto, Cazeaux derribó a Marichal y en el decimosegundo el árbitro amonestó en dos ocasiones al campeón por entrar con la cabeza. Al final, el combate nulo fue lo más justo.

Casi dos años después de su primera intentona, Domingo Giménez volvería a probar un nuevo asalto al título europeo, en esta ocasión ante el campeón italiano Natale Vezzoli que hacía unos meses se había coronado campeón al derrotar al francés Cazeaux. El 12 de noviembre de 1976 hace la primera defensa del título contra Giménez.

El italiano se posicionó en los primeros asaltos en el centro del ring y el español intentó en varias ocasiones entrar en la corta distancia sin conseguirlo. En el sexto asalto, una derecha del campeón abrió la ceja del aspirante que a partir de aquí fue hacia abajo. Entre los asaltos 11 y 12 el árbitro llamo al médico de la velada para que examinara al español y este determinó que la herida era muy profunda y no podía continuar, decretando el KOT del español. El combate se celebró en Milán en el popular Palalido con capacidad para seis mil personas.

Natale Vezzoli volvía a conceder una oportunidad a otro español, al conquense residente el Mallorca Isidoro Cabeza. El 11 de agosto de 1978 en Lepe (Huelva), en el Club Raúl, con asistencia de más de tres mil aficionados, se celebró el combate en velada organizada por Martín Berrocal y con el mayor presupuesto hasta ese momento en España con el título superpluma en juego, ocho millones. Vezzoli cobró la mayor bolsa de su carrera por defender el título en España.

Encarnizado combate y decisión apretada con dominio alternativo de los púgiles. Primero fue el mallorquín Cabezas quien llevó el peso del combate y desde el noveno fue el campeón que debido a su mejor boxeo se fue imponiendo por técnica y forma física.
Los tres últimos asaltos fueron los que dieron el triunfo al campeón al sacar provecho de sus golpes más efectivos. Las puntuaciones fueron del árbitro señor Gibbs, 145-144, del juez Jensen alemán 146-144 y el suizo Marty 146-144, todas a favor del campeón, que retenía el título.