José Manuel Moreno
@josemorenoco

El bicampeón olímpico Vasyl Lomachenko (3-1, 1 KO) retuvo su corona mundial del peso pluma de la WBO tras derrotar en Macao (China) al tailandés Chonlatarn Piriyapinyo (52-2, 33 KO). No fue una buena noche la del sábado en el Cotai Arena, y tampoco contribuyó a su brillantez este combate de semifondo del Pacquiao-Algieri. El ucraniano, en su cuarta pelea profesional, y primera defensa del título que ganó en junio a Gary Russel Jr., fue tremendamente superior como indican explícitamente las cartulinas de 120-107 de los tres jueces, unanimidad que rara vez se produce. Fue un combate monótono y por momentos aburrido. Ni la caída del tailandés en el cuarto asalto sacó del sopor a los más de 13.000 espectadores que esperaban ver a Manny Pacquiao. Una lesión en la mano izquierda de Lomachenko imposibilitó que cerrara la pelea con un nocaut como hubiera deseado el campeón y todo el público. Compubox no engaña: 333 golpes conectados por el ucraniano por 88 del tailandés. Como tampoco quita el mal sabor de boca que en general dejó la velada entre los aficionados, que esperaban mucho más.