José Manuel Moreno
@josemorenoco

Por fin hubo fumata blanca para «Kid Chocolate» Peter Quillin (31-0, 22 KO). El boxeador de Chicago permanecía inactivo desde el 9 de abril de 2014 cuando retuvo por tercera vez su corona del peso medio de la WBO ante el checo Lucas Konecny. Desde entonces, la nada, dejando el cetro vacante y dejando con la miel en los labios a su presunto rival, el ruso Matt Korobov, sin combate el pasado mes de noviembre, y eso que contaba con la suculenta bolsa de 1,4 millones de euros. El estadounidense fichaba por el manager Al Haymon, que le recomendaba bajarse de ese combate, a pesar de sus consecuencias. Pasado el tiempo, Andy Lee (34-2, 24 KO) ocupó, tras vencer a Korobov, la corona de Quillin. Y ahora se sabe que el próximo 11 de abril, en la misma velada que pelearán, sin cinturones en juego, Lamont Peterson y Danny García, también lo hará Quillin frente al irlandés Andy Lee por su campeonato del mundo. Buena jugada a simple vista, aunque en cualquier caso no sea nada aconsejable estar un año parado cuando se tiene 31 años. La velada se celebrará probablemente en el Barclays Center de Brooklyn, Nueva York, y será retransmitida en abierto en prime time por la poderosa NBC.