Lewis Ritson-Jeremías Ponce

El campeón del mundo superligero Josh Taylor (19-0, 13 KO) sigue siendo puesto a prueba por los diferentes organismos, y ahora es el turno de la IBF.

Taylor era campeón indiscutible de la categoría hasta que, a los dos meses de su defensa contra Jack Catterall, la WBA, con una extraña prisa (en otros pesos, su campeón no defiende título desde 2019 y ahí siguen) ordenó su defensa contra Alberto Puello. Como Taylor no estaba interesado, le quitaron el título, algo parecido a lo que hizo el WBC, también selectivo y poco constante en sus acciones, por no exponerlo frente a José Zepeda.

Ahora es la IBF quien ha ordenado a Taylor defenderlo ante el argentino Jeremías Ponce (30-0, 20 KO), aspirante oficial desde hace más de un año. Se ha impuesto un periodo de negociación hasta el 23 de agosto, cuando se celebraría la preceptiva puja si no hay acuerdo previo.

En caso de que Taylor optase por la revancha con Catterall, el título quedaría vacante y la pelea por el cinturón la disputarían Ponce y el boricua Subriel Matías (18-1, 18 KO) en condición de coaspirantes.