Daniel Pi
@BastionBoxeo
Muchos no creyeron las informaciones que señalaron que el ruso Sergey Kovalev sólo recibiría un contrato de dos peleas con DAZN si perdía su combate contra Saúl “Canelo” Álvarez, alegando que todo eso eran rumores sin base, conspiraciones para intentar desprestigiar al mexicano. Pues bien, el hecho es que lejos de resultar simples habladurías, todo ello se ha materializado tal y como se había previsto.
Y es que se ha llegado a un acuerdo para que Kovalev, que había realizado sus últimos combates en ESPN, regrese de su derrota contra Álvarez el 25 de abril en una velada que emitirá DAZN y que organizará la propia promotora que dirige la carrera de Canelo, Golden Boy Promotions. Su adversario será el cubano Sullivan Barrera, un púgil que no está en una gran posición tras sus derrotas ante Dmitry Bivol y Jesse Hart y que necesita una victoria de relieve a toda costa para intentar mantenerse en la cumbre del peso semipesado.
De todos modos, las dificultades de Barrera no son nada comparadas con las de Kovalev, quien está en una posición crítica en lo deportivo y en lo extradeportivo.
Los rumores de que sus problemas con el alcohol se habían agravado se vieron certificados por una reciente detención por conducir ebrio, disputas con la justicia a las que se añade un juicio pendiente por una supuesta agresión a una mujer. En cuanto a lo deportivo, la derrota ante Canelo y, especialmente, haber declarado que aceptó esa pelea por dinero sabiendo que no podía ganar, han dejado su prestigio por los suelos. Además, se debe añadir que su falta de disciplina le lleva a tener problemas con el peso, afirmándose que su combate contra Barrera se ha pactado 2 kg por encima del peso semipesado por ese motivo.
De vencer, se espera que Kovalev realice su siguiente combate contra un insigne peso semipesado, hablándose de la posibilidad de que su segunda pelea en DAZN sea contra el campeón Bivol en lo que podría ser prácticamente una despedida del boxeo profesional para el veterano exmonarca. Con todo, antes deberá ganar a un Barrera que, pese a sus tropiezos, es un púgil siempre bien preparado físicamente y que debería saber que si plantea un encuentro de desgaste le pondrá las cosas difíciles a su contrincante.
