Darío Pérez
@ringsider2020

La gala promovida por Matchroom Boxing en el Madison Square Garden de Nueva York se saldó con dos nuevas campeonas unificadas y un par de potenciales aspirantes mundiales superwélter y mosca.

La irlandesa Katie Taylor (21-0, 6 KO) y la portorriqueña Amanda Serrano (42-2-1, 30 KO) disputaban todos los títulos mundiales del peso ligero, que aportaba la europea. Demostración brutal de las capacidades del boxeo femenino, con acciones técnicas destacables de la irlandesa en los primeros asaltos y Serrano buscando dañarla cambiando trayectorias distintas. La puertorriqueña quería unas acciones en la corta distancia y la irlandesa, como hemos visto otras veces, no rehusaba el cuerpo a cuerpo pese a que su técnica es superior a la centroamericana. El quinto round fue clave en la pelea, con tremebundos impactos a favor de Amanda Serrano que Taylor se tragó sin anestesia en la corta distancia, renunciando de nuevo al plan que más le convenía para intercambiar cuero y resultar, en este caso, más dañada de lo que ella habría deseado. Tras un sexto parcial similar, la excampeona olímpica cada vez ofrecía menos movilidad por el castigo que estaba recibiendo. Siguió la pelea igual, con Taylor hábil, buscando el clinch y con exceso de cabeza adelante, y Serrano más activa; lamentablemente, los asaltos femeninos siguen siendo a dos minutos y nos impiden disfrutar de un boxeo al alza, y veinte minutos nos saben a poco con dos gladiadoras como las dos hoy presentes. Los jueces vieron las acciones 96-94 para Serrano, 97-93 y 96-94 para Taylor, unas puntuaciones difíciles de ver para el espectador neutral pero muy en consonancia con lo que Eddie Hearn nos tiene acostumbrados para los eventos que organiza a favor de su púgil.

La pelea de semifondo nos ofreció al británico Liam Smith (31-3-1, 18 KO) y al norteamericano Jessie Vargas (29-4-2, 11 KO) en una pelea que se había aplazado el pasado mes de enero. Precioso pleito en el que ambos dieron lo mejor de sí mismos con bellos asaltos en los que poco a poco se fue haciendo sitio el británico, con mayor rodaje y fortaleza que un estaodunidense que ahora podrá, probablemente, volver a su carrera político. Cuando ya era demasiado castigo, sobre todo desde la mitad de la pelea, el árbitro paró el combate en el décimo asalto, y Liam Smith se queda a las puertas del título mundial.

En otra unificación total en el boxeo femenino, en este caso en el peso supermedio, la estadounidense Franchon Crews-Dezurn (8-1, 2 KO) como campeona WBC y WBO y la sueca Elin Cederroos (8-1, 4 KO), con los títulos IBF y WBA, protagonizaron una bonita pelea llena de intercambios donde la local solía llevarse la mejor parte. La sueca acabó con una tremenda hemorragia nasal y cedió ante Crews-Dezurn con puntuaciones de 99-91, 99-91 y 97-93.

Anteriormente, Ammo Williams (11-0, 9 KO) acabó con Chordale Booker (17-1, 7 KO) en un asalto dentro del peso medio y el mosca Galal Yafai (2-0, 2 KO), campeón olímpico, dio buena cuenta de Miguel Cartagena (17-7-1, 8 KO), a quien dominó completamente desde el inicio de las hostilidades y despachó en dos asaltos.