Nota de prensa
El boxeador granadino John Carter se lesionó este martes por la mañana. Estaba haciendo un “sparring” en Málaga y un golpe recibido reprodujo una vieja lesión y sus efectos. Este miércoles pudo saberlo cuando el médico le diagnosticó que sufre “dismorfia septal con desviación de tabique” que le provoca “insuficiencia respiratoria”.
La exploración también determinó que deberá ser tratado durante “al menos dos semanas”. Y eso le impide estar en condiciones de pelear con el italiano Michael Magnesi por el título de los superpluma de la Unión Europea el 22 de febrero, la fecha decidida por el promotor. Sin embargo, Carter no quiere renunciar a disputar el “combate más importante de mi carrera”. Por eso pide a la EBU (Unión Europea de Boxeo) que “haga todo lo que esté en su mano para que la pelea se pueda retrasar al menos dos semanas, el tiempo con el que me conformo para recuperarme” y de este modo “se pueda celebrar”.
John Carter se encuentra ahora ‘tocado’ a nivel psicológico. “Desde que me nombraron coaspirante al título de la Unión Europea no he parado de trabajar y entrenar fuerte. Casi se podría decir que no he tenido vacaciones de Navidad. Y ahora me pasa esto. Pero bueno, confío en que entiendan las circunstancias y que el combate se pueda retrasar, porque yo me quiero recuperar y subirme al ring. Es algo con lo que sueñan todos los boxeadores de Europa y no quiero dejar pasar la oportunidad”.
A Carter aún le duele recordar lo que pasó el martes por la mañana. “Me fui a Málaga a seguir la preparación y peleé contra otro boxeador. En un asalto recibí un golpe en la nariz que me hizo bastante daño y provocó que me empezara a salir sangre, pero seguí porque estaba caliente. Y cuando llegué a casa empezó a dolerme más y tenía la nariz bastante hinchada. Tenía algunas molestias para respirar, por eso fui el miércoles al médico”.
Carter tiene claro que “no voy a dejar de entrenar”, aunque ahora debe hacerlo con muchas precauciones porque “ya estoy siendo tratado”. “Esto mismo me pasó en otras oportunidades. Pero estuve haciendo lo que me dijo el médico y al final me puse bien y pude subir tranquilamente al ring después de estar recuperándome durante un mes o así. Por eso, la lesión no me preocupa, porque se ha demostrado en varias ocasiones que es subsanable y que puedo volver a estar en perfectas condiciones. Lo único que me preocupa es que me den el mínimo margen que necesito. Porque si subo al ring ante Magnesi no es por la bolsa. Es porque no quiero desaprovechar la oportunidad de ganar el ‘cinto’. Y para eso tengo que estar en perfectas condiciones. Si no es así no puedo pelear, no me lo perdonaría jamás por mucho dinero que me llevara aunque perdiera”.
A Carter no se le pasa por la cabeza otra cosa que no sea pelear. “Sé que los organizadores o la EBU me pueden quitar como aspirante si no hay aplazamiento, la pelea se mantiene el día 22 y yo no voy. Pero no quiero ni pensar en eso. Ahora sólo quiero pensar en que me van a escuchar y que el combate se va a celebrar. Sé que Magnesi es un gran rival. Que es un tío muy duro, que lo respetan mucho en Italia y que es el campeón allí de la categoría. Y no paran de decirme que el combate puede ser una encerrona, que los árbitros barrerían para casa y que sería muy difícil ganar a los puntos. Pero yo no quiero pensar ni hacerle caso a nada de eso. Yo quiero pensar sólo en lo mío. Porque si me dejan estar al 100% de mis capacidades voy a tener bastantes opciones de ganar”.