Daniel Pi
@BastionBoxeo

Después del susto de tener que pesarse cuatro veces para no perder su título en la báscula (al primer intento dio 63,7 kg, 200 gramos por encima del límite del peso superligero), Maurice Hooker (26-0-3, 17 KO) se desquitó de los apuros pasados con una clarísima victoria ante un Mikkel LesPierre (21-1-1, 10 KO) que no ofreció su mejor versión y que no fue rival para el espigado monarca mundial WBO del peso superligero.

Este combate coestelar del evento organizado en el Turning Stone Resort and Casino de Verona (Estados Unidos) y emitido en España por DAZN (a pesar de no estar en su programación durante los últimos días, el evento fue finalmente emitido) dejó cartulinas de 120-107, 119-108 y 118-109, en las que se cuenta un knockdown favorable a Hooker.

El aspirante LesPierre salió dispuesto a tomar la iniciativa, pero los largos brazos de Hooker, utilizados en seco jab y en potente directo de derecha, hicieron pagar caras las tentativas de avance de su rival. Así, el monarca pronto tomó mucha confianza y empezó a descargar fuertes combinaciones de gancho zurdo-recto diestro que impactaron con contundencia ante LesPierre, que a duras penas podía hacer otra cosa que tirar algún directo e intentar buscar eventualmente encerrar a su adversario y lanzar contra él breves series en corta.

Ni su posición de zurdo le sirvió al aspirante para generar mínimas complicaciones al estadounidense, que en el tercer asalto estremeció al retador con una derecha enlazada con un hook de izquierda, combinación que acompañó posteriormente con un buen trabajo al torso con durísimos ganchos.

No haciendo gala de la rapidez de otras ocasiones ni de sus grandes acciones elusivas de otras peleas, LesPierre se encaminaba a una abultada derrota en las cartulinas, pero no fue esto lo más preocupante, sino que en el quinto asalto pareció aproximarse el nocaut técnico con un largo hostigamiento de Hooker sin respuesta.

Erróneamente, en el sexto asalto Hooker decidió intercambiar golpes en la distancia media-corta, permitiendo que el trinitense anotase sus mejores manos del combate, pero el monarca pronto recapacitó, volvió a hacerse espacios y retornó a su dominio con el jab y con la derecha a la contra o al ataque.

Durante los siguientes asaltos hubo ciertas oscilaciones en la posesión de la iniciativa y en la distancia combatida, pero no en quién era el que se hacía con los episodios, un Hooker que, a pesar de algún voluntarioso envite de LesPierre, en casi todo momento conectó más y mejor, tanto que en el noveno asalto logró un knockdown con un temible gancho al hígado, atacando intensamente a su afectado oponente en la reanudación antes de que éste reaccionase con enorme valor.

Como Hooker tiene tantos posibles adversarios de entre los que elegir a su siguiente oponente, nada se puede dar por sentado aún, pero tras el combate el campeón retó a Jack Catterall, su aspirante obligatorio para este 2019, que estaba entre el público presenciando el campeonato. Así parece que, aunque la defensa oficial debería llegar a finales de año, Hooker quiere quitarse ese compromiso de encima cuanto antes y poder focalizarse en otros rivales, si bien está por ver si Eddie Hearn aceptará sin más esa oportunidad inminente para un Catterall miembro de la escuadra de su archirival Frank Warren sin antes darle la pelea titular a un púgil como Chris Algieri miembro de su compañía y para el cual ya ha invertido dinero.