Gennady Golovkin tiene un objetivo entre ceja y ceja: unificar los cuatro cinturones del peso medio. El kazajo posee en la actualidad tres de ellos (WBC, WBA e IBF), siendo dueño el británico Billy Joe Saunders del de la Organización Mundial (WBO), que tanto anhela «GGG» conseguir. Un enfrentamiento entre ambos podría estar próximo, trabajando K2 Promotions para cerrar esta pelea para el 10 de junio en Kazajistán, coincidiendo con la inauguración de la Exposición Universal. En caso de que Saunders rechace el combate, el bahameño Tureano Johnson será el rival escogido para la primera pelea en seis años de «GGG» en su país natal.
Según Abel Sánchez, entrenador de Golovkin, el boxeador kazajo subiría al peso supermedio buscando nuevos retos tras conquistar los cuatro títulos, salvo que «el pelirrojo», como apodó Sánchez a «Canelo» Álvarez, firme la pela con «GGG». La última actuación del rey del peso medio ante Daniel Jacobs parece haber alejado la realización de la pelea en septiembre, manteniéndose firme Óscar De la Hoya en la propuesta que realizó hace meses a Golovkin. Por otro lado, el estadounidense Andre Ward estaría dispuesto a regresar al peso supermedio para pelear con Golovkin, aunque todavía tiene pendiente la revancha con el ruso Sergey Kovalev.