El púgil estadounidense Gervonta Davis ha sido acusado de un delito por la corte de Baltimore, que podría condenarle con diez años de prisión. El excampeón mundial IBF del peso superpluma fue arrestado este verano al golpear a un amigo de la infancia, teniendo que abonar 100.000 dólares Davis para ser puesto en libertad, a la espera del fallo del juez.