Darío Pérez
@Ringsider2020

A sus 29 años, el estadounidense George Rincón (10-0, 7 KO) está buscando acción. Comenzó con turbulencias su carrera profesional, y hasta 2018 no comenzó a pelear con regularidad. Previo a su combate contra Luis Solís (antiguo rival de Kerman Lejarraga) del próximo sábado en la velada Vergil Ortiz-Maurice Hooker, ha recibido a ESPABOX para que la afición española pueda conocerle.

-Hola, George. ¿Cómo estás?
-Hola, todo bien, gracias.

-Apellidándote Rincón y siendo nacido en Texas, no nos equivocaremos mucho si intuimos orígenes mexicanos, ¿verdad?
-Sí, yo nací en Dallas, Texas, pero tengo familia en Monterrey.

-Llegas un poco tarde y te cuesta afianzarte al boxeo profesional. ¿Puedes compartir tus inicios y la etapa amateur con nuestros lectores?
-Lo que es pelear, empecé desde los ocho años en este mundo, pero sí que esperé bastante a hacerme profesional. Yo quería llegar al equipo para los Juegos Olímpicos, y cuando llegaron no tenía aún la edad reglamentaria, 17 o 18 años, y tuve que esperar otro ciclo.
En esa siguiente ocasión, estuve en los trials (las pruebas estadounidenses para determinar a sus representantes en cualquier competición deportiva), pero desafortunadamente no me pude clasificar. Al año siguiente, ya me hice profesional.

-En 2014, efectivamente, eres ya profesional, pero haces un combate y desapareces dos años, y luego no encuentras regularidad hasta 2018. ¿Qué ocurrió?
-Al empezar mi carrera tuve unos problemas con mi mánager y no tenía peleas hasta que por fin conocí a Lamont Roach Sr. (que aún es quien lleva mis asuntos) y acabé firmando con Golden Boy Promotions.

«No suelo buscar el KO, llega solo»

-Eso provoca que, como decíamos, desde 2018 y ya en 2019 tengas mucha actividad. Cuando empezó la pandemia, habías hecho cinco combates en un año. ¿Cómo te afectó el asunto del covid, has podido mantenerte en forma en estos meses tan difíciles para todos?
-Siempre hay que estar en el gimnasio, constantemente trabajando y listos para lo que sea. Lo bueno que tengo es que, cuando no tengo peleas, también doy clases de boxeo a clientes. Si no es para mí, estoy trabajando con otras personas también en el gimnasio y eso me ayuda a no desconectar del deporte.

-De uno a diez, ¿Cómo estás de ansioso por volver al ring?
-Por supuesto que diez, y además imagínate las ganas que tengo de regresar siendo la pelea en mi estado de Texas.

-Y ya no te queda nada, menos de una semana para la pelea. ¿Ya estás en la última fase, bajando peso?
-Estoy ya listo, entrenando muy bien para el 20 de marzo lo que venga. De peso estoy muy bien, este campamento ha sido muy positivo porque he estado mejor que nunca en el sentido del peso. No tendré que achucharme mucho para dar el peso, ya terminando casi.

-Para tu categoría, el superligero, tienes un gran porcentaje de victorias antes del límite ¿Preparado para otra más?
-Claro que sí, a todos nos gusta el nocaut, pero yo me centro en lo que hay que hacer y escuchar a mi esquina. No suelo buscarlo, acaba llegando por sí mismo si peleas con inteligencia y van llegando los golpes.

-Veremos la pelea en España a través de DAZN, y además Vergil Ortiz es un boxeador muy seguido, por lo que tendrás buena audiencia. ¿Qué veremos de George Rincón, cómo eres cuando te encierras en las dieciséis cuerdas?
-Yo no creo que tenga muchísimo poder y sea el más rápido o el más fuerte, pero creo en mi habilidad, mi inteligencia y mis movimientos de pies para clavar los golpes donde mejor me ayuden a lograr el KO. Hago caso a mi equipo y soy un boxeador de movimiento, cabecear y esas cosas, no ir siempre hacia delante.

-¿Más escuela estadounidense que mexicana, entonces?
-Sí, podría ir adelante, a la corta distancia, pelear por dentro o por fuera… Al final, depende de lo que me proponga también el contrincante.

-Tienes 29 años y diez combates profesionales. A pesar de que ahora la carrera de los deportistas se alarga mucho, ¿te sientes con un poco de prisa para pelear todo lo que puedas de cara a posicionarte para combates importantes, como si otro de tus rivales fuera el reloj biológico? ¿Cuáles son tus planes en ese sentido?
-Mmmm (pensativo)… Un poco, no puedo decir que no ando pensando en la edad y cuánto me pueda quedar de carrera, pero no me quiero poner presión ni sentir prisa. Espero que en año y medio pueda hacer ya algún título regional e ir poco a poco subiendo con más peleas buenas.

«De los actuales boxeadores, me quedo con Lomachenko»

-¿Tienes algún ídolo o alguien que nunca te pierdas sus combates?
-Mi favorito es Julio César Chávez. El papá, ¿eh? (risas cómplices de todos). Siempre me gustó ver cómo peleaba, aunque ya te digo que no tengo su estilo de ir adelante. Pero la verdad es que me encantaba verle, sus movimientos, su defensa, el gancho al hígado, etcétera. De los actuales, me quedaría con Lomachenko.

-¿Has estado alguna vez en España o sabes algo de nuestro boxeo? Tenemos un campeón europeo de tu categoría, zurdo como tú, en la figura de Sandor Martín. Podría ser buen combate en unos meses o un año en Estados Unidos.
-Nunca he ido por allí, y es uno de los lugares que más interés tengo en visitar algún día. Y bueno, sobre lo que me dices, cuando yo tenga una o dos peleas más y siga subiendo el nivel, podría ser interesante el cruce.

-Nos despedimos ya de ti, recordándote que te veremos en acción dentro de unos días y, por tanto, puedes mandar un mensaje o un saludo a los lectores de ESPABOX.
-Primero, quiero agradeceros el tenerme aquí. Estoy bien preparado para el 20 de marzo, para estar en la cartelera de Vergil Ortiz y Maurice Hooker. Ando listo para que todos ustedes vean qué tipo de boxeador soy, ¡no se lo pierdan!

Gracias a ti también y mucha suerte.