Daniel Pi
@BastionBoxeo

Cinco días después de que sus compatriotas Taguchi y Kyoguchi tuviesen una jornada complicada en el Ota City General Gymnasium de Tokio (Japón), este viernes al mediodía (en hora española) otros dos destacados boxeadores japoneses se subirán al mismo ring en peleas trascendentales. Y es que, mientras el vencedor de uno de los cruces entrará con total seguridad a la segunda temporada de las World Boxing Super Series, el ganador del otro combate podría apuntar a una triple unificación de coronas a continuación.

Burnett, Tete y Rodríguez a la espera
Que el enfrentamiento entre Naoya Inoue (15-0, 13 KO) y Jamie McDonnell (29-2-1, 13 KO) tenga en juego uno de los absurdos e inútiles cinturones secundarios WBA (en este caso el regular, el de supercamepón lo posee Burnett) resulta a todas luces insignificante e intrascendente en la pugna, a pesar de lo que muchos medios señalan. No obstante, que esté confirmado que el vencedor de este interesante encuentro vaya a acceder a un proceso eliminatorio contra figuras del peso gallo como los monarcas Ryan Burnett, Zolani Tete y Emmanuel Rodríguez no puede ser más relevante, demostrando ello una vez más el valor de las World Boxing Super Series, que al incluir a los mejores boxeadores de una división en un torneo resta importancia a las malas decisiones de los organismos.

Por lo que se refiere al enfrentamiento, recordando los problemas que sufrió McDonnell ante púgiles como Tomoki Kameda y Liborio Solís, siendo muchos los que opinan que no mereció ninguna de las tres victorias a los puntos que logró contra estos, parece que el temible “Monster” Inoue no debería tener demasiados apuros para imponerse. Valorando que el nipón es más veloz y explosivo, más potente y hábil, que ha realizado sesiones de sparring con boxeadores espigados y con envergadura y que además peleará como local, no parece que un McDonnell con un boxeo simple y que se castiga para dar el peso gallo pueda estar a la altura. Además, Inoue no quiere dejar dudas: “McDonnell es un duro peleador pero quiero noquearlo de un puño”.

Apuntando a Budler
Después de la hecatombe para la división del peso minimosca en Japón con la derrota el pasado domingo de Taguchi a manos de Hekkie Budler, nuevo campeón WBA e IBF, al monarca WBC Ken Shiro (12-0, 6 KO), que pretendía disputar una unificación ante su compatriota a finales de año, sólo le queda modificar su objetivo y tratar de negociar ahora con el sudafricano. De todos modos, con la derrota de Taguchi, Shiro es considerado de una forma más clara todavía el número 1 de la categoría del peso minimosca, hegemonía que podría sellar con una victoria en duelo de revancha ante el excampeón mundial mexicano Ganigán López (34-7, 19 KO).

Teniendo en cuenta el igualado desarrollo de la primera pugna, es posible que de nuevo el choque sea muy difícil de romper para ambos, puesto que, aunque el veterano López tiene un excelente uso de los golpes rectos, la astucia al ataque y al contragolpe de Shiro compensa las buenas acciones de su rival, produciéndose una constante lucha táctica por el control del centro del ring y de la iniciativa en la que los reflejos del japonés juegan un papel clave. Así, llegando a la pugna López menos rodado y pareciendo que el local está experimentando una evolución en su boxeo, Shiro partirá como favorito para, imponiendo su velocidad de reacción, su buena gestión de los tiempos y de los espacios y su destreza defensiva, volver a salir con el brazo en alto.

En la ceremonia de pesaje Inoue y McDonnell marcaron el límite exacto del peso gallo, 53,5 kg, mientras que Shiro y López dieron un idéntico 48,8 kg para mantenerse por debajo del límite del peso minimosca (49,0 kg).