Daniel Pi
@BastionBoxeo

El título de campeón de España del peso superligero, cinturón que se encuentra vacante, no será el único que se pondrá en juego esta semana, sino que también otro cetro nacional sin dueño tendrá un nuevo poseedor. Y es que el viernes, en el Casino Gran Madrid de Torrelodones, los coaspirantes a la corona del peso supermedio Damián Biacho (9-0, 2 KO), de Madrid, y Eusebio Arias (7-1, 4 KO), de Elche, se verán las caras en una pugna que elegirá al sucesor de Adán Silvera como monarca nacional de los 76,2 kg.

El imbatido Biacho será el favorito en esta pugna, puesto que, aunque todavía no ha vencido a un púgil con más victorias que derrotas en su récord, el dos veces campeón de España amateur es un púgil de gran calidad técnica, metódico en tareas defensivas, hábil con los directos y con buen juego de piernas, por lo que resulta difícil vencerle a los puntos.

No obstante, Arias posee contundentes crochés en la distancia media, cuenta con ventaja en pegada (57% de victorias antes del límite por el 22% de su rival) y, lo que es más importante, no es un púgil que pretenda ser usado como mera piedra de toque sino que tiene la moral del boxeador con aspiraciones, especialmente tras anotarse su mayor triunfo en su pelea más reciente.

Así, el duelo, sobre el papel, es el mayor test que Biacho ha afrontado desde su victoria dividida ante Rui Manuel Pavanito (junio de 2017), una pelea que debería decantar con su rapidez y astucia pero en la que no podrá cerrarse y detener sus pasos, escenario que le permitiría a Arias sacar lo mejor de su repertorio y poder causar daños relevantes.