El resultado más polémico de las últimas semanas en el boxeo mundial ha sido el triunfo por puntos, mediante decisión dividida, de Arnold Barboza Jr. sobre Sean McComb.
Sucedió este pasado sábado en Brooklyn (Estados Unidos), dentro de la gala que fue coronada por la sorpresa de Ryan García y su victoria ante Devin Haney. En teoría, Barboza estaba preparado para salvar el pleito principal por si ocurría algo y su rival europeo era de teórico rodaje, ya que el estadounidense está como número uno en las listas WBO. Debería ser, por tanto, rival futuro del campeón Teófimo López por el mundial.
La actuación de Barboza, sin embargo, dejó mucho que desear y fue superado por McComb para casi todos los que vieron la refriega. Lee Eaton, apoderado del irlandés, decía hace horas que «es un chiste. Mi boxeador ganó la pelea ocho rounds a dos, como mucho siete a tres en el peor de los casos. Y nadie piensa distinto, desde redes sociales, aficionados americanos, comentaristas…todos vieron que robaron a Sean, es una broma diabólica. Voy a apelar a la comisión del estado neoyorquino y pedir por escrito a la WBO una revancha. También me dirigiré a la promotora Golden Boy, porque sentimos que nos han privado de lo merecido y han arruinado la carrera de nuestro púgil. Realmente no entendemos qué hace Barboza celebrando una victoria así».
