Carlos Utrilla
@CJBoxing
Fotos: Sebastian Lukasz

(LOS CAMPEONATOS ÍNTEGROS SE PODRÁN VER EN MARCABOX EL PRÓXIMO VIERNES)

Se esperaba mucho de la velada que se celebraba anoche en el Pabellón Jorge Garbajosa de Torrejón de Ardoz y la verdad es que respondió a las expectativas. El ambiente fue in crescendo y culminó en la pelea de fondo de la noche, para deleite de los algo más de 2.500 espectadores que casi llenaban el recinto.
Nicolás González y Eloy Iglesias culminaron algo más de seis horas de boxeo con una excelente y disputada pelea. El zaragozano hizo gala de una exquisita técnica y obligó a “Nico” a emplearse a fondo para poder retener el cinturón de Campeón de España del peso superligero, uno de los tres que se disputaron en el evento.

La paciencia es la madre de la ciencia
Eloy Iglesias llegaba a la cita más importante de su carrera y en todo momento demostró que sabía cómo pelearle al campeón. En constante desplazamiento, cuando era llevado contra las cuerdas el aragonés intentaba lanzar sus manos antes de que Nicolás González se posicionara bien de pies. Mostrando elegancia, el maño fue adquiriendo la confianza suficiente como para quedarse en varias ocasiones a intercambiar golpes, aunque su esquina le pidiera que evitara hacerlo.
Tras unos primeros rounds de tremendo desgaste, a partir del 4º pareció que la movilidad era menor y que el madrileño podría comenzar a inclinar la balanza hacia su lado. Sin embargo, en los dos asaltos siguientes Iglesias volvería a tomar el control con combinaciones rápidas y buenas esquivas.
Pero “Nico” sigue mostrando mejoras en su boxeo pelea a pelea. Así, ayer se le vio un poco más de precisión y, sobre todo, inteligencia para no ponerse nervioso y esperar su momento. Fue castigando abajo una y otra vez para erosionar progresivamente a su contrario y el trabajo comenzó a cristalizar en la parte final del 7º parcial, donde parecía que el aspirante podía caer.
No fue así, pero Iglesias ya estaba tocado. En el 8º, González siguió con la labor de desgaste, persiguiéndole por todo el ring mientras que aquél sólo acertaba a escapar. Cuando “Nico” metió casi 15 manos seguidas (aunque ninguna rotunda) sin que su rival acertara a lanzar golpe alguno, el Sr. Oliver Palomo paró las acciones. En el momento de la detención, nos comentaron que Iglesias estaba delante en las tres tarjetas por escaso margen. La decisión arbitral fue protestada; a pesar de ello, parecía claro que Nicolás González ya tenía el control de la pelea.
Un paso más, positivo, en la carrera del de La Cabrera. Eloy Iglesias, por su parte, dejó una gran imagen: este debe ser el camino a seguir.

Iglesias-Gonzalez

Cristian Morales retuvo el título
Con anterioridad, Cristian Morales lograba defender con éxito el título ligero al ganar por puntos a Antonio González “Chiky” en su primera defensa. La diferencia de envergadura parecía a priori que determinaría el estilo de la pelea, aunque quizá sorprendió que el aspirante usara un boxeo más cerebral y menos ofensivo que en peleas anteriores.
Aunque le costó algún round encontrar la distancia, Morales pronto comenzaría a dominar usando la izquierda en jab y, sobre todo, llegando con derechas rectas y curvas por fuera, un golpe característico en él. Si bien parecía no llegar con excesiva fuerza, sí le permitía puntuar. Frente a él “Chiky” no acababa de sacar el espíritu guerrero que exhibió en combates como los dos frente a Sergio Romero, por ejemplo. Alguna buena derecha a la contra y momentos puntuales de presión eran su mejor bagaje; parecía no pasar por muchos problemas, pero tampoco acababa de creárselos al campeón.
A medida que se acercaba el final, la intensidad pareció subir. Rodríguez comenzaría a apretar el acelerador en el 8º, aunque Morales supo replicar primero con varias izquierdas y, después con alguna buena derecha para hacer su mejor round. En el último, el aspirante intentó buscar la mano salvadora, pero Cristian no se dejó sorprender.
Las tarjetas fueron unánimes para Morales, que retenía de esa manera el cinturón: 98-93, 98-92 y 96-94.

Rodriguez-Morales

Giro inesperado, Tejada campeón
Eso es precisamente lo que ocurrió en el primer Campeonato de España de la noche, el del peso gallo, disputado entre David “Maravillita” Sánchez y Saúl Tejada. La pelea fue de entero dominio del de Leganés, que dejó muestras de la clase que siempre ha atesorado y recordó a aquél que tanto sorprendió en los primeros compases de su carrera.
Realmente bailó por el ring, tomó el control desde el inicio, propuso la pelea, manejó la izquierda con maestría, combinó acertadamente. Frente a él, el leonés Tejada poco podía oponer: apenas sacaba manos y pareció acusar las de su contrario, hasta el punto de que a punto estuvo de visitar la lona en ambos parciales.  A pesar de que a partir del 3º estuvo más activo, en el 4º el Sr. Agapito Gómez le realizaba acertadamente una cuenta de protección, pues sólo las cuerdas le salvaron de caer. La pelea seguía en control de “Maravillita”, que en cualquier momento podría noquear a su rival.
Pero en el 6º llegó el giro, el cambio de rumbo. Tejada, aleccionado por la esquina salió a jugársela y en un ataque cazó a David Sánchez con una derecha recta seguida de un croché. “Maravillita” cayó a la lona, aunque pudo levantarse y tomar aire al habérsele caído el protector bucal. Sin embargo, y a pesar del tiempo transcurrido (más de 25 segundos desde la caída), no estaba recuperado. Cuando el de León volvió a conectar, cayó nuevamente a la lona y el referee decretó el final. Un sorprendente KOT en el 6º.
El boxeo es así de cruel o agradecido. David Sánchez lo había hecho todo bien y perdía su oportunidad. Tejada supo resistir y aprovechar su momento.

Tejada-Sanchez

Combates previos
En el peso ligero, Alex Rat Jr. ganó por puntos en decisión unánime a Fausto Rego en lo que era un duelo de debutantes. El local, Rat, mostró buenos movimientos y una izquierda muy activa (es diestro).
También en el ligero, Brian Peláez ganó a Paco Agudo por decisión mayoritaria en una guerra cuyo resultado cuestionaron algunos.
En peso medio, Javier Fuentes derrotó a Alex Gilabert por KOT 4º, un combate en el que la izquierda del ganador inclinó la balanza para su lado. La esquina de Gilabert protestó la parada del árbitro Sr. Ruiz, pero este consideró que Gilabert no respondía a los ataques de Fuentes.
En peso ligero, Alae Karmoun reaparecía para vencer a Carlos Mairena por decisión unánime en 4 rounds.
En wélter, David González vencía a Michael Oyono por decisión dividida en un combate táctico cuyo resultado tampoco hizo feliz a todos
En superpluma, Sebastián “Látigo” Pérez derrotó por puntos en decisión unánime a Luis Espinosa. “Látigo” Pérez fue la revelación de la noche, ganando a un hombre duro como Espinosa: velocidad, esquivas, cambios de guardia… magnífica presentación en Madrid de un hombre muy joven que dará que hablar.
En peso medio Francisco Durán derrotó a Gonzalo Romero por KOT en el 6º, cuando muchos veían ya a “El Flaco” Romero como vencedor. Y otra decisión polémica del árbitro Sr. Conejero al parar el combate por una caída de Romero, cuya esquina consideraba que podía seguir.
Y en pluma se producía el regreso al ring del talentoso Sergio “Sugar” Romero, cuya mano izquierda marcó la diferencia ante un Mariano Ramos que peleó hasta el último momento. Decisión unánime para el madrileño (ambos en la foto, atacando Romero).

Ramos-Romero