José Manuel Moreno
@josemorenoco

El propietario de la promotora Golden Boy Promotions, el excampeón mundial en seis divisiones diferentes Óscar de la Hoya está empeñado en ofrecer las mejores peleas a los aficionados. Y una de ellas, indiscutiblemente, sería el campeonato unificado del peso supergallo entre el cubano Guillermo Rigondeaux (15-0, 10 KO) y el mexicano Leo Santa Cruz (29-0-1, 17 KO).»Quiero sus corona del WBC para añadir a la mías de la WBA y WBO, espero que se haga la pelea» ha afirmado el «Chacal».

«No sé si Al Haymon (manager de Santa Cruz) quiere el combate pero los boxeadores lo quieren y los aficionados y los promotores también» expresó públicamente De la Hoya. Santa Cruz se proclamó campeón mundial del peso gallo en junio de 2012 tras vencer a Vusi Malinga. Realizó tres defensas victoriosas, subiendo a la división del supergallo. En la misma se coronó en agosto de 2013 después de noquear en tres asaltos a su compatriota Víctor Terrazas. Posteriormente, cuatro defensas con éxito, la última de ellas ante Jesús Ruiz el pasado 17 de enero en el MGM de Las Vegas. El súper técnico Rigondeaux fue campeón del mundo por vez primera en enero de 2012 cuando demolió al estadounidense Rico Ramos. Desde entonces ha sumado seis victorias en su invicto palmarés destacando de ellas la que consiguió frente a Nonito Donaire en abril de 2013. No tiene rival. Mejor dicho, tiene uno, al menos. Y ese es Santa Cruz, otro invicto, 8 años más joven (34 por 26). «Y después de Santa Cruz, iremos por Frampton para terminar de unificar coronas», afirmaron en el equipo de Rigo.