Emilio Marquiegui
@EmilMarquiegui

De todos es sabido el daño que ha causado al boxeo la WBA (Asociación Mundial de Boxeo) con la creación de tantos títulos mundiales, interinos, regular, supercampeón, etc. Y ahora le salpica al gran Gennady Golovkin. Son muchos los medios de comunicación que adjudican 19 títulos mundiales al kazajo, pero no es cierto.

Cuando en 2010 disputó el título interino (que no es un mundial, dado que hay otro campeón), el sólido campeón del mundo era el alemán Felix Sturm, pero por razones bastardas fue ascendido a supercampeón para dejar paso a Golovkin, cuando en realidad deberían haber peleado ambos, pero así es la WBA.
Por lo tanto, Felix Sturm siguió siendo el número uno de la organización como supercampeón, por lo que Golovkin, que comenzó a disputar paralelamente el título «regular», no puede ser considerado campeón cuando tiene a un boxeador por encima en el mismo organismo.

Sturm pierde el título en 2012 ante el australiano Daniel Geale, que en octubre del mismo año es desposeído por no querer hacer la defensa obligatoria, y es ahí cuando Golovkin debe ser considerado el campeón mundial, cuando llega a número uno de la WBA.
Y entonces, con el combate ante Gabriel Rosado, son 13 los títulos mundiales que legalmente debemos adjudicar a Golovkin. Así también pensarán Bernard Hopkins y tantos otros que consiguieron con sudor sus títulos siendo los campeones, los números uno de sus organismos.

En fin, la WBA, que tanto daño hizo, hace y esperamos que deje de hacer por el bien del boxeo y elimine de una vez la duplicidad de campeones. Así nos lo prometieron los Mendoza en su visita a Marcabox en enero de 2015, pero… parece que las palabras se las lleva el viento.