PBC organizará el próximo 30 de julio una estupenda, sobre el papel, velada con tres combates altamente interesantes en el Barclays Center de Brooklyn (Nueva York). No porque se enfrenten los mejores boxeadores de sus pesos, sino por la poca certeza acerca de los ganadores.

Encabezarán la gala Danny García (36-3, 21 KO) y José Benavídez Jr. (27-1-1, 18 KO), que disputarán como máximo doce asaltos en el peso superwélter, al que asciende el excampeón García. A sus 34 años, vuelve tras año y medio, e intentará reponerse de su derrota ante Errol Spence Jr, pero en un peso quizás algo elevado para su físico.

Su rival será el hermano mayor de David Benavídez, que volvió con un empate y no muy buenas sensaciones el pasado noviembre, tras estar tres años inactivo. Es un combate enigmático porque de él saldrá un nombre interesante para medir a los mejores de la categoría, ya que no parece ninguno de los púgiles en su mejor momento.

Como complemento, dos no menos curiosas propuestas. En el peso pesado, se verán las caras a diez asaltos el polaco Adam Kownacki (20-2, 15 KO), invicto hasta sus dos últimas, y estrepitosas derrotas, ante el finlandés Robert Helenius.
Se medirá al olímpico turco Ali Eren Demirezen (16-1, 12 KO), en una gran racha tras su derrota ante Efe Ajagba. Combate de encrucijada entre dos boxeadores con más de treinta años con ganas de subirse a su último tren.

Abrirá la velada, al menos en su parte principal, quizás el mejor combate de los tres sobre el papel. Gary Antuanne Russell (15-0, 15 KO) intentará reponerse a la pérdida de su progenitor sobre el cuadrilátero y acercarse más a los títulos mundiales del peso superligero, aún a la espera de saber lo que hace con ellos Josh Taylor. El también olímpico se mide a un veterano, el cubano Rancés Barthelemy (29-1-1, 15 KO), otro campeón mundial que será la más dura prueba para Russell en su carrera.