Daniel Pi
@BastionBoxeo

En una pelea en gran parte desarrollada en la distancia corta y lastrada por innumerables entradas en clinch disputada en el SSE Arena Belfast de Belfast (Reino Unido), el británico Ryan Burnett (18-0, 9 KO) se convirtió en titular unificado IBF y WBA del peso gallo al derrotar por decisión unánime al hasta entonces poseedor de la segunda de las coronas, el kazajo Zhanat Zhakiyanov (27-2, 18 KO). Las cartulinas fueron de 119-109, 118-110 y 116-112, ya que los jueces no se dejaron confundir por el empuje y la agresividad de Zhakiyanov y valoraron adecuadamente la mayor efectividad de Burnett.

Si bien era de esperar que “ZZ” atacase con fiereza desde el inicio, su acometividad fue todavía más intensa y constante de lo esperado, aunque en gran parte descontrolada, provocando constante agarres por parte de ambos que ya en el primer round motivaron que el árbitro llamase la atención a los dos boxeadores. Aun así, y aunque Burnett intentó caminar el ring y hacerse algo de espacio, la tendencia del enfrentamiento no cambió, desarrollándose mayoritariamente en un cruce de golpes en corta entre agarres parciales o completos.

Pese a que de haber podido combatir desde la distancia larga o media Burnett se hubiese hecho con una victoria todavía más solvente, su desempeño en el combate exigido por la desesperada persecución de Zhakiyanov fue bastante bueno, dado que, ante las combinaciones imprecisas y los puños de corto recorrido del kazajo, el local impuso contragolpes, especialmente en gancho zurdo arriba y abajo, que impactaron con total claridad y notable contundencia, decantando los asaltos a ojos de los jueces y de todo aquel que no se perdiese entre los constantes clinches y las andanadas con más voluntad que acierto del visitante.

Viendo que podía resistir bien la agresividad de su rival, Burnett se dejó llevar por su coraje y en muchos momentos ni siquiera intentó distanciarse de su oponente, sino que arremetió contra Zhakiyanov e incluso le obligó a retroceder con sus uppercuts diestros encadenados con ganchos de mano adelantada. Por otro lado, en cuanto a los aspectos defensivos, ágiles esquivas en los momentos oportunos permitieron que el invicto púgil resolviese dudas en los episodios en los que la elevada frecuencia de su adversario mantuvo más parejas las acciones.

Aunque hasta el último tañido ambos combatieron de una forma similar, en el último cuarto el dominio de Burnett se hizo algo más evidente al conseguir desplazarse brevemente y poder imponer tanto su tenso jab como su uno-dos y su excelente combinación hook zurdo-directo diestro, sentenciando así su triunfo. Cuando se proclamó su victoria, junto al estallido del público, Burnett a penas pudo contener las lágrimas, habiendo conseguido un triunfo crucial que, teóricamente y hasta que se resuelva la situación de Yamanaka y Nery, le sitúa como el número 1 de la categoría. Ciertamente, el choque ante Zhakiyanov no pudo cumplir las expectativas de quienes esperasen ver un gran despliegue técnico y táctico de Burnett, pero el nuevo doble titular mundial mostró tanta paciencia como resistencia, además de versatilidad y capacidad de adaptación, de modo que parece tener grandes posibilidades de éxito en las dos complicadísimas defensas obligatorias que disputará en el próximo año.