Daniel Pi
@Bastionboxeo

Diez meses después de su victoria ante Ashley Theophane, y habiendo dejado atrás graves problemas personales, Adrien Broner (32-2, 24 KO) pretende demostrar que definitivamente se ha reformado. Para ello combatirá en la pelea estelar de un evento televisado por Showtime desde el Cintas Center de Cincinnati, Estados Unidos. De todos modos, su reaparición vuelve a estar lejos de ser idónea, ya que, no pudiendo dar el peso pactado inicial de 64,4 kg, el cruce fue acordado posteriormente en el límite wélter de 66,7 kg.

Dejando al margen el negativo precedente, Broner afrontará este sábado un reto mayor de lo que parece, puesto que se tendrá que medir al durísimo Adrián Granados (18-4-2, 12 KO) que, a pesar de ser poco conocido, no es un oponente en absoluto asequible. El «Tigre» ha sufrido todas sus derrotas de forma ajustada y casi siempre ante boxeadores de nivel como el imbatido Frankie Gómez o el oro olímpico Félix Díaz, no habiendo sido nunca vencido antes del límite o de forma unánime. Además, en 2015 logró noquear contra pronóstico al prometedor Amir Imam.

Sin duda, Broner hará frente a un riesgo importante, puesto que Granados es muy resistente y agresivo, buscará constante la distancia corta y probablemente logre mantenerse en ella. Así, es más que posible que Broner se vea obligado a ofrecer su versión más defensiva, con numerosas entradas en clinch, que tanto desagrada al público y que no siempre le da resultados. Si realmente hubiese recuperado su mejor boxeo, su superior técnica y velocidad podrían valerle para mantenerse muy dinámico y superar a su contrincante de forma constante al contraataque, pero, siendo una incógnita su condición física, se espera que deba batallar en un duelo sin espacios en el que tiene más que perder que ganar.

Y es que, si bien será ligero favorito y en principio su claridad en el golpeo, su explosividad y su variedad de recursos deberían darle la victoria, imponerse a Granados sólo le servirá para cumplir con lo esperado. Pero si su valiente rival consigue suplir su inferior destreza con acometividad y se hace con el triunfo, la posición de Broner quedará en una situación verdaderamente complicada.