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Un lector nos ha hecho llegar esta página del Diario AS del 28 de julio de 1981, publicada con la firma del histórico cronista Fernando Vadillo. En la misma, Enrique Soria, actual presidente de la Federación Madrileña de Boxeo y en aquel momento mánager de Perico Fernández entre otros boxeadores, repasaba los planes para el púgil maño, así como del marroquí Mimoun Mohatar, quien disputó, sin éxito, el título mundial WBC del peso ligero en 1978 ante Carlos Palomino.
Soria se quejaba del escaso apoyo de la Federación Española de Boxeo al boxeo profesional, una vez pasados los años dorados protagonizados por Pedro Carrasco, José Legrá o Miguel Velazquez. Cabe recordar, que en aquel momento, la Federación Española de Boxeo subvencionaba con 30.000 pesetas por velada a cualquier promotor que organizase un evento, desapareciendo estas ayudas por parte de las federaciones hace años.
El otrora mánager reclamaba a la Federación Española de Boxeo que no destinase la mayoría de su presupuesto al boxeo amateur, de igual manera que ocurre hoy en día, dado el escaso interés de los aficionados, alegando que el boxeo aficionado no podría existir sin el profesional.
La solución propuesta por Soria es la creación de una Federación Española de Boxeo Profesional protegida por las autonomías, pronosticando que dicho proyecto se culminaría «en menos de dos años».
Treinta y seis años después, la situación es idéntica, como declaró su hijo, el también mánager Kike Soria, en una entrevista en este medio en diciembre de 2016. A diferencia de la mayoría de países, donde ya se han establecido organismos profesionales independientes, en España no se ha encontrado solución, estando cerca de separarse el boxeo amateur del profesional hace tres años, con el visto bueno del CSD, pero el entonces presidente de la Federación Española de Boxeo, Antonio Martín Galán, decidió a última hora no firmar el documento que hubiese materializado la escisión del boxeo profesional.
