Daniel Areces
@DArecesGlez

Dejado atrás el mal sabor de boca que supuso el resultado en el Frontón de Riazor, donde Aitor “el Diamante” Nieto perdería a los puntos ante Iván Sánchez “Dinky” por el cetro nacional superwélter, tocaba arrancar nueva temporada y en nueva categoría, el peso wélter. El primer duelo de la temporada sería ante Iban Gallardo en el mes de noviembre. Gallardo, que llegaba para ofrecer batalla, abandonó después del primer asalto tras padecer una incontrolable hemorragia nasal. Nieto, con esta victoria, afrontaría en su siguiente combate su segunda pugna por un título nacional. En ésta ocasión, por el título nacional wélter vacante, que se encontraba en tal situación después de que su anterior monarca, Ferino V, asaltase el título de la Unión Europea y regresase con victoria antes del límite ante a Stefano Castellucci.

Por tanto, el título nacional se lo disputarían el asturiano y el balear, José “el Niño” del Río. Combate que se encuadraría en el mes de noviembre y que se saldaría con victoria a los puntos para Aitor Nieto. El asturiano salió desde el primer tañido de campana a asfixiar a su contrario y en el octavo asalto, le hizo pasar serios apuros al otrora monarca wélter. Victoria que suponía romper con más de treinta años de oscuridad, pues desde que Gómez Fouz ganase a Rafael Gutiérrez en 1983 por el nacional superligero, Asturias se quedaría huérfano de campeones de España de boxeo Profesional. Se intentaría en varias ocasiones por medio Juan del Valle, Alfonso Sánchez o Alejandro Rodríguez Pereira, pero sin éxito.

Como flamante campeón de España, Nieto se dispondría a defender su recién adquirido título y en las quinielas, además de ser el aspirante oficial, figuraba el púgil canario Zebenzui Díaz. Pero al final no pudo ser, pues Díaz dejo de lado su carrera pugilística y su lugar sería ocupado por el cántabro Daniel “la Cobra” Rasilla. Antes de la defensa, llegaría Yuri Pompilio en febrero, en sustitución del francés Roger Matiouze que no pudo viajar a España debido a la normativa que regula el boxeo francés. El asturiano vencería con autoridad a los puntos al púgil afincando en San Sebastián y en el mes de abril, llegaría su primera defensa.

Defensa disputada en Oviedo, en la que Aitor Nieto impondría su ley desde un primer momento ante un Daniel Rasilla, que ofreció batalla con los puños y el corazón, pero su sueño de proclamarse campeón en tres pesos diferentes tendría que esperar. Primera defensa superada con éxito y con ella bajo el brazo, tocaba afrontar el último combate de la temporada, pero no sin antes, conocer su próxima defensa titular. Con el regreso a la actividad del púgil valenciano Jorge Fortea, y su consiguiente victoria ante Nuzgar Margvelashvili, la Federación Española le situó en la posición de aspirante oficial al título del asturiano. Era prácticamente una realidad, que el siguiente duelo titular seria ante Fortea, pero no fue así y en su lugar, tendrá lugar la revancha con Daniel Rasilla.

Conocido el nuevo compromiso titular, llegaría el último combate de la temporada ante el colombiano Euclides Espitia. Combate que dejó tras de sí, mucha historia que contar pero por no entrar en temas de política ni mencionar a los cuatro impresentables de turno, el combate se desarrolló en Hotel Castillo Bosque de la Zoreda. Enfrentamiento ante un Espitia, que ofreció mucha guerra y llegando a poner en algún apuro al asturiano, pero que se saldaría con victoria a los puntos a favor de Aitor Nieto.
La presente temporada llegaría a su fin. Siguiente parada para el asturiano, próximo 20 de septiembre en el Pabellón Pedro Velarde (Cantabria) donde le espera la revancha con Daniel Rasilla. En el horizonte, también se sitúa Europa y es por ello, que mirará con lupa el duelo entre Ferino V y Ahmed El Mousaoui que tendrá lugar a priori en otoño.