El coronavirus ha borrado por completo el calendario deportivo de las próximas semanas, siendo una de las últimas cancelaciones la pelea entre Anthony Joshua y Kubrat Pulev, la cual debía celebrarse el 20 de junio en el Tottenham Hotspur Stadium de Londres (Reino Unido). Este enfrentamiento fue ordenado por la IBF, organismo del que Joshua es campeón del peso pesado junto a la WBA y la WBO.

El promotor del británico, Eddie Hearn, ha abierto una esperanza al optimismo en esta situación con estas declaraciones: «La pelea entre Joshua y Fury comienza a tener prioridad sobre una pelea de Pulev, si la pelea de Pulev se retrasa más allá del verano».

El escollo para que se anticipe el Joshua vs. Fury es el compromiso contractual que obliga a Fury a disputar de manera inmediata una revancha con Deontay Wilder.