Gracias a las galas saudíes, parece que el boxeo ha entrado en una nueva dinámica de agilidad que no tenía en estos pasados años, con los campeones más activos y negociaciones para próximos combates sin dilatarse eternamente en el tiempo.

Cuando parecía que esta generación del peso pesado habría sido el típico ¿y si…? porque no se enfrentarían entre ellos, Turki Alalshikh ha propiciado muchos y buenos choques en poco espacio de tiempo. Es lo que está ya ocurriendo después de la victoria de Daniel Dubois ante Filip Hrgovic el pasado sábado en Riad.

Dubois se ha convertido en número uno de las listas y retador oficial del campeón IBF (además del poco serio título interino), puesto heredado del vencido croata. Obviamente, el campeón es Oleksandr Usyk. Este privilegio es objeto de deseo de Anthony Joshua, que ha renacido y quiere volver a probar las mieles de los títulos. Por eso, ambos equipos ya negocian para poder medirse el próximo 21 de septiembre en Londres.

El citado organismo es el único que ha insinuado que Usyk debería defender su trono frente a su retador, algo parecido a lo que sucede en el peso supermedio con Saúl “Canelo” Álvarez. Por tanto, quizás el hipotético combate que se está negociando pudiera conllevar el mundial IBF y, seguramente, el turno de medirse para la unificación total para el ucraniano, siempre que este supere de nuevo a Tyson Fury en diciembre.