Daniel Pi
@BastionBoxeo

Siempre se le acusa de ser aburrido y de no dar espectáculo, pero en esta ocasión el campeón mundial WBO del peso medio Demetrius Andrade (28-0, 18 KO) sí logró levantar de sus asientos a los espectadores en The Meridian at Island Gardens de Miami (Estados Unidos), ya que, en el combate estelar de un evento que se desarrolló la pasada madrugada, derribó dos veces al irlandés Luke Keeler (17-3-1, 5 KO) y se impuso por KOT en el noveno asalto.

Con unos segundos transcurridos, una izquierda alcanzó nítidamente a Keeler, que cayó a la lona, siendo hostigado en la reanudación con una acometividad inusual por parte del monarca, que volvió a tumbar a su retador con un croché zurdo en el segundo round.

Aunque Keeler, evidentemente, no estaba al nivel del campeón ni tenía mucho sentido que disputase este mundial, lo cierto es que dio todo lo que tenía, aguantó fuertes golpes de poder y trató de contestar con ofensivas frontales, lentas y un tanto desordenadas pero repletas de valentía. Con todo, con coraje sólo no se puede vencer si hay tal diferencia en todos los demás elementos que deciden un combate, por lo que en adelante Andrade siguió controlando las acciones con sus golpes aislados desde la distancia larga con sus larguísimos brazos, con sus caóticas sucesiones de amagos y curvos en la distancia media y con unas esquivas de cintura nada sutiles.

El enfrentamiento vio su ritmo decrecer, e incluso por momentos, cuando Andrade comenzó a caminar más el ring, pareció que se podrían volver a terminar viendo doce asaltos de monótono dominio pero, además de las valerosas acometidas de Keeler, esta vez el monarca no quitó el pie del acelerador completamente, manteniéndose en la búsqueda del nocaut, que precipitó en el noveno episodio. De nuevo la magnífica izquierda de Andrade llegó contra Keeler contundentemente, siendo estremecido. Así, el local sólo tuvo que presionar algo más, impactar un uppercut diestro enlazado con una izquierda y posteriores series de crochés para obligar al árbitro a detener el combate.

Al finalizar el encuentro, Andrade mencionó al campeón WBO del peso supermedio Billy Joe Saunders, quien podría ser su mejor opción para mediados de año si no es que el británico es finalmente elegido por Canelo como oponente. Por lo demás, estando Golovkin emplazado a un encuentro contra Szeremeta y pareciendo que Jermall Charlo ni siquiera va a aceptar la oferta multimillonaria que ha recibido para pelear contra él, Andrade va a tener muy complicado encontrar un adversario de élite para su próxima defensa, debiendo esperar seguramente a la segunda mitad del año para tener opciones de alcanzar el combate trascendental que tanto tiempo lleva esperando.