Andoni Gago perdió el título europeo en Marbella

Darío Pérez
@Ringsider2020

Espectáculo veraniego esta noche en el Marbella Arena, en una velada organizada por MGZ con la colaboración de Saga Heredia y MTK.

El plato principal de la velada fue el Campeonato de Europa del Peso Pluma, entre el poseedor del cinturón Andoni Gago (24-4-4, 7 KO) y el aspirante francés Karim Guerfi (30-5, 9 KO), múltiples veces monarca continental de la categoría gallo.

Esta segunda defensa del bilbaíno no empezó bien, pues el Machito presentó ya un corte al final de su ceja izquierda a mitad del primer asalto. En estos rounds iniciales, Gago sacaba más trabajo y buscaba liderar la ofensiva, pero los golpes más aislados del Guepardo llegaban con mucha fuerza al rostro de nuestro púgil. Guerfi se adaptó al ritmo del campeón, y le recibía, cada vez más, con peligrosos rectos cuando el vasco intentaba arrinconarle.

Pero el corazón de Andoni Gago nunca debe ser subestimado, y su motor de diésel, junto al buen trabajo en la esquina de Ricardo Sánchez Atocha deteniendo su hemorragia, intentaban al francés al llegar al ecuador del pleito, con una cadencia cada vez más alta en las ofensivas. La astucia de Guerfi residía en iniciar y terminar muy bien cada parcial de cara a mostrarse hacia los jueces, aparte de moverse mucho para evitar las encerronas en las cuerdas. Era, en ese sentido y afrontando el último cuarto de la contienda, bastante difícil de puntuar lo que se estaba viendo entre las dieciséis cuerdas. No cambió nada en los llamados rounds de campeonato, con el francés amonestado por usar la cabeza, por tener suelto el esparadrapo de los guantes continuamente y haciendo kilómetros para evitar el empuje del vizcaíno, que seguía, incansable, buscando combinar en el rostro de Guerfi.

Treinta y seis minutos después, todos nos preguntábamos qué pensarían los jueces, en una pelea de gran dificultad a la hora de anotar el diez y el nueve; y dijeron que había nuevo campeón europeo por decisión dividida, anotando unos aceptables 115-113, 113-115 y 116-112 para Karim Guerfi.

En la pelea coestelar de la noche, el antiguo campeón de España y la Unión Europea del peso supermedio Ronny Landaeta (18-3, 11 KO) buscó reencontrar sensaciones contra el francés Nizar Trimech (8-2, 3 KO), complicadísimo oponente de buena trayectoria amateur. El galo salió impetuoso en los primeros asaltos, muy agresivo contra el hispano-venezolano (a veces, demasiado, lo que le valió alguna reprimenda arbitral, algo que no ocurrió con los golpes a la nuca de Landaeta), que recibió manos peligrosas. El Llanero, tirando de experiencia y recursos, fue poco a poco clavando golpes en la anatomía del francés, cada vez con más frecuencia y precisión, y el visitante pasó apuros en el cuarto asalto, aunque sacó de nuevo buen trabajo en el quinto. Tras un emocionante sexto capítulo, los oficiales dictaminaron 58-57, 58-56 y 58-56 a favor de Ronny Landaeta, puntuación muy protestada por parte de Trimech y su equipo. Con total objetividad, las tarjetas fueron demasiado generosas con el boxeador local, y en nuestra opinión, el visitante mereció mejor suerte.

Otra contienda interesante fue la mantenida entre el polaco Eryk Apresyan (8-1, 5 KO) y el ucraniano Vladyslav Baranov (7-10-2, 5 KO), a seis asaltos en el peso superwélter. En el primero, sorpresa con la caída de Apresyan, teórico favorito; sin embargo, el afincado en Marbella se recuperó, se afianzó en el segundo asalto y derribó a Baramov dos veces en el tercer parcial con buenas manos a la zona hepática. Siguió mejor el polaco hasta el sexto y último round, afianzando el triunfo en opinión de los jueces con puntuaciones de 58-53, 58-53 y 58-55, extraña como poco.

Hubo varios combates preliminares. En el peso superligero, el debutante sevillano José Seda (1-0, 0 KO) y el venezolano Dionis Martínez (9-23-3, 4 KO) protagonizaron un combate bastante competido, mostrando Seda una evolución durante la pelea tras quitarse los nervios del novato. Seda venció por decisión mayoritaria (38-38, 39-38 y 39-37).

Otro rookie, el peso medio marroquí Marouane El Khartouti (1-0, 0 KO), venció en un feo duelo al húngaro Pal Olah (9-36-3, 7 KO), que vino con pocas ganas de ser competitivo. Así, en el segundo asalto le quitaron un punto por usar la cabeza y sufrió un derribo por golpe a la zona del oído. En el tercer round, el señor Alloza le sustrajo dos puntos más consecutivamente al magiar, quizá de manera demasiado rápida, con lo que Olah fue descalificado.

El también peso medio marroquí residente en Andalucía Ayoub El Fahmi (2-0, 1 KO) venció al veterano colombiano Christopher Mena (2-4-3, 2 KO), en una batalla bonita sobre todo en su primera mitad para el aficionado, con espléndidos intercambios en la media y corta distancia. 60-54, 59-55 y 60-54 fueron las cartulinas, quizás excesivas, de los jueces tras los seis asaltos pactados.

Finalmente, el duelo entre dos rusos residentes en España tuvo la balanza inclinada desde el primer segundo, ya que Arsenii Garibian (5-1, 4 KO) volvió tras dos años de inactividad atropellando en el primer asalto a Elkhan Bairamov (1-14, 1 KO), cuya esquina tiró la toalla ante su manifiesta inferioridad; Bairamov lleva trece derrotas consecutivas y solo pudo vencer a Adrián Torres por la lesión de este; quizá debería replantearse si subirse a un cuadrilátero es lo mejor para su salud.