Adrien Broner parece no aprender la lección, sumando un nuevo escándalo a su larga lista que ensombrece su talento deportivo. Horas después de inquietar a su entorno con un posible suicidio, el excampeón mundial recibió el apoyo de Floyd Mayweather, con el que estuvo entrenando. Aprovechando su visita a la ciudad del pecado, Broner acudió a un club a altas horas de la madrugada, agarrando del cuello y amenazando a una camarera del local. La policía decidió no arrestar al boxeador ante la falta de pruebas, pero la agredida podría poseer un vídeo con lo ocurrido, que cambiaría el caso.