Fernando Sanz
@fer_tito_14
El mexicano Isaac “Pitbull” Cruz (28-3-1, 18 KO) consiguió un triunfo con autoridad el pasado sábado en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas, al imponerse de forma clara por decisión unánime a Omar Salcido (20-3, 14 KO), en una pelea organizada a última hora tras la caída del combate frente a Ángel Fierro. Con este resultado, Cruz se proclamó campeón interino WBC del peso superligero y dejó constancia de que sus aspiraciones no terminan aquí. Desde el comienzo del combate, el estilo agresivo de Cruz volvió a destacar: presión constante, combinaciones poderosas y dominio del terreno. Salcido, quien aceptó el desafío con poco tiempo para prepararse, resistió con valentía durante los diez asaltos e incluso se mantuvo en pie tras una caída en los segundos finales. No obstante, las puntuaciones de los jueces (100-88, 99-89 y 99-89) reflejaron la superioridad del boxeador capitalino.
Más allá del cinturón interino, la victoria representa para Cruz una nueva oportunidad para consolidarse entre los tres mejores boxeadores mexicanos del momento. En rueda de prensa, el púgil de 27 años evitó entrar en polémicas por la cancelación de la pelea con Fierro, aunque sí transmitió un mensaje claro: prefiere expresarse con los puños sobre el cuadrilátero. Reconoció, eso sí, el coraje de su rival y dejó claro que está listo para lo que venga: “No importa quién esté enfrente, nosotros venimos a pelear”.
Las palabras del campeón interino no carecieron de significado. Con su nombre en el centro de atención de la división, se vislumbra un posible enfrentamiento con el campeón absoluto del WBC, el puertorriqueño Subriel Matías, quien destronó a Alberto Puello hace unos días. Esta podría ser una de las peleas más emocionantes de las 63,5 kg. Matías ha expresado su deseo de unificar, y Cruz podría ser el siguiente desafío en su camino hacia ese objetivo.
Tras su derrota ante José Valenzuela en 2024, el boxeador de Ciudad de México ha logrado dos victorias consecutivas, incluyendo su triunfo contra Ángel Fierro en febrero de este año. Con esta destacada actuación, el «Pitbull» parece haber recuperado su posición entre la élite. Su fuerza, estilo y personalidad lo mantienen relevante en el escenario mundial.
