Con el paso de las horas, la posibilidad de que el 29 de abril tenga lugar el combate entre Tyson FuryOleksandr Usyk se desvanece. Si el pasado viernes prácticamente se daba por cerrado el duelo, este lunes se ha conocido que el británico ha rechazado la solicitud del equipo del ucraniano para incluir cláusulas de revancha en los contratos.

La pelea por todos los títulos mundiales del peso pesado requeriría de varias semanas de promoción, y el margen de tiempo es mínimo para que la fecha del 29 de abril se mantenga para su realización.

Fury comenzó el pasado sábado su preparación para el combate, como él mismo anunció en sus redes sociales, lo cual ha aumentado los rumores de un posible aplazamiento de cara al verano, pues el inglés apenas tendría un mes de dura preparación para uno de los combates más importantes de su carrera.