Daniel Pi
@BastionBoxeo

El hecho de tener en un cartel el nombre de Manny Pacquiao, uno de los mejores boxeadores del siglo XXI, significa para cualquier evento tener asegurado recibir una gran atención. De todos modos, si la velada que se disputará este sábado en la Axiata Arena de Kuala Lumpur (Malasia) está teniendo en ciertos sectores una gran acogida parte de ello es debido también a la extendida difusión de una mentira, la que dice que en el evento se producirán ni más ni menos que cuatro campeonatos mundiales. En realidad esto es totalmente falso, puesto que ni el choque de Pacquiao tendrá en juego, en teoría, un mundial absoluto, sino uno regular (si bien en la inscripción del cinto para el vencedor pone “supercampeón”, cosa que ha causado gran confusión), ni lo tendrán tampoco otros dos combates del cartel, sino que se disputarán tóxicos cinturones secundarios WBA, creándose uno nuevo expresamente para este evento.

Realmente, sólo habrá un campeonato absoluto y éste será por el vacante cinturón IBF del peso mosca, por el que pelearán el excampeón sudafricano Moruti Mthalane (35-2, 24 KO)(en la foto) y el pakistaní de buena carrera amateur Muhammad Waseem (8-0, 6 KO), dos boxeadores que, por otra parte, no parecen haber hecho los méritos suficientes para ganarse este asalto mundialista.

En el caso de Mthalane, su retorno a los rings en 2017, después de 16 meses de inactividad, fue sucedido por tres victorias ante boxeadores muy lejanos al nivel del top 15, si bien su condición de excampeón IBF y su gran recorrido pueden llegar a hacer remotamente comprensible su clasificación. No obstante, la posición de Waseem como coaspirante resulta mucho más difícil de justificar, puesto que exceptuando su victoria polémica y ajustada en noviembre de 2016 ante el invicto, pero sin poner a prueba, Giemel Magramo, su nivel de oposición ha sido extremadamente bajo, debiéndose mencionar que desde el citado encuentro han transcurrido veinte meses en los que “Falcon” ha peleado por encima del peso supermosca y con tres boxeadores que sumaban un récord combinado de 13-23-7. Además, el único cinto menor por el que ha combatido Waseem era del WBC, algo que no explica cómo se catapultó en el ranking IBF.

Más allá de que parece que Waseem ha sido sobrevalorado en las clasificaciones y se le ha otorgado esta oportunidad para ayudar a mejorar la pésima situación del boxeo profesional en Pakistán, que tuvo su primer órgano regulador para el pugilismo rentado en 2012, el encuentro debería resultar entretenido y sin un abrumador favorito.

Mthalane ha desarrollado una carrera estupenda, en la que con su firme presión y su fortísima pegada ha batido a boxeadores como Zolani Tete (fue al inicio de la carrera de éste), como el excampeón John Riel Casimero o como el exmonarca europeo Andrea Sarritzu, siendo ocho de sus últimas diez victorias antes del límite. Asimismo, en los últimos 14 años sólo Nonito Donaire lo ha derrotado. Sin embargo, ha sostenido largos periodos de inactividad y se acerca al final de su larguísima carrera (lleva cerca de 18 años en activo), por lo que es de esperar que su falta de velocidad habitual se agrave, sobre todo en comparación con un boxeador como Waseem tan sumamente rápido de manos, con tanta variedad de recursos y que es capaz de repetir su gancho zurdo arriba y abajo y salir de la distancia antes de que sus rivales armen el contragolpe.

Pese a ello, Waseem no tiene experiencia profesional ni mínimamente equiparable a la de Mthalane, por lo que es una incógnita cómo podrá desenvolverse ante un boxeador de muchísimo mayor nivel que el de cualquiera de los púgiles con los que ha combatido o ha realizado sparring. Así, realmente un inesperado declive en el rendimiento del africano o un descuido del imbatido, cuyo encaje es un misterio, podrían decidir la pugna, si bien se espera que Waseem, entrenado por Jeff Mayweather, pueda hacer valer su mayor movilidad y rapidez para evitar el demoledor directo de Mthalane que, eso sí, de ver que su adversario se detiene un instante no dudará ni tardará en causar estragos.

En la ceremonia del pesaje, los dos coaspirantes se mantuvieron por debajo del límite del peso mosca (50,8 kg), ya que Waseem paró la romana en 50,484 kg y Mthalane lo hizo en 50,575 kg.